Viktor adora ver a Yuuri comer, decía que así su cerdito demostraba estar saludable. La parte más divertida de la comida, son las frutas. Viktor ama ver a Yuuri consumir toda clase de frutas, ya que éstas contienen toda clase de vitaminas que le hacen bien al cuerpo.
Viktor ama todo lo que le hace bien a su cerdito bonito, por eso, le compra siempre de sus frutas favoritas; las fresas.
—Oh, Viktor —gimió el japonés, dando otra lamida.
—¿Te gusta?
—¡Claro! —sonrió mientras seguía lamiendo.
Una jugosa y fresca fresa con crema batida.
—Te vas a atragantar —rió el ruso mientras tomaba de su taza de café, mirándolo desde el sofá mientras Yuuri está sentado en el tapete del suelo, los recipientes sobre la mesita del centro. Pareciera que ve a un niño pequeño comer.
—Mmne balew (Me vale) —le replicó con la boca llena de crema, lamiendo incluso la que quedaba alrededor de sus labios, llamando la atención de su esposo.
—Te ves muy gracioso, solnyshko —el mayor deja la taza y el periódico a un lado, y se pone en la misma posición que el japonés en el suelo.
—Y te diviertes al mirarme, supongo —rió el menor—. ¿Quieres? —bañó una fruta en la crema y le convidó a su esposo, quien antes de morderla, lamió la punta y la succionó, para finalmente encajarle los dientes.
—Están buenas —dijo, para luego inclinarse a besar los belfos mojados del nipón.
—Sí.
—Mi turno —agarró una del recipiente y la embadurnó para luego acercarla a los labios de Yuuri, pero en lugar de dejar que la mordiese, la apartó un poco, ocasionando que el japonés gimoteara de disgusto.
—¡No vale!
—La vas a chupar... como me chupas a mí —alzó una ceja sugestivamente, con una sonrisa ladeada.
—Oh, ¿así va a ser?
El japonés se puso de rodillas y puso ambas manos alrededor de la muñeca del mayor, como si tomara su virilidad, acercó su boca a la fruta y comenzó a trabajarla, tal y como hace con el pene del ruso. Siente sus mejillas encenderse furiosamente, pues la mirada lujuriosa de Viktor lo ataca mientras éste se frota su entrepierna sobre la tela de su ropa.
—Me calientas mucho, lyubov. No puedo evitarlo —jadeó mientras Yuuri aún seguía entretenido con la fresa, hasta que se le olvidó que lo miraban, y cerró sus ojos, succionando la fruta que comenzaba a desmoronarse en su boca y parte de sus labios.
Yuuri súbitamente deja de moverse, Viktor lo nota y deja de distraerse con la boca del japonés, notando cómo éste poco a poco llega hasta su regazo, y el ruso saca la mano, dejando que Yuuri se siente sobre él.
Sobre su ya dolorosa erección.
—Ah, lyubov —protesta el ruso, comenzando a sentir el vaivén de las caderas del nipón sobre él.
—Mmn~ Vitya.
Yuuri finalmente había acabado la fresa, pero eso no impidió que el ruso en su poca cordura, agarrara otra del recipiente y la mojara en más crema.
—Ven por ella, kobuta-chan —rió para luego pillar la fresa en sus labios.
Yuuri no lo pensó dos veces antes de abalanzarse sobre la boca de su esposo y embarrarse ambos de la dichosa fruta junto con la crema, pues estaban tan inmersos frotando sus entrepiernas que todo lo demás sobraba. Tener fruta en toda la cara era lo de menos.
Viktor apretó a su antojo todo el culo de Yuuri, metiendo las manos por dentro de la ropa, incluso de la interior mientras la fresa en su boca era parcialmente desecha por la de Yuuri, quien se sostenía de los hombros de Viktor. El conocido calorcito empezó a emerger de ambos, pues ya conocían sus mañas de antes de correrse. Yuuri tragó con furor toda la fruta antes de gemir en la boca de Viktor y estrellarse en su momento placentero, asfixiado y pegajoso por demás, mientras que el ruso hizo acopio de embestir unas cuántas veces más al japonés para finalmente agarrar él la ola de placer.
—Ah, hora de un baño —soltó el mayor.
—Ya no veré el comer fresas del mismo modo —dijo Yuuri luego de un rato, sonriente. Chilló de sorpresa cuando fue alzado en brazos por el ruso.
—¿Y si intentamos a la próxima con una banana? —mordió el cuello del menor, jugando.
—No me des ideas, Nikiforov.
Adivinen quien se atiborró de frutas amarillas más tarde.
[...]
7u7r mente cochina la mía kjsksjskjsjss
Nos vemos, ¡besos!
¡Davai~!
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To Make You Cum
Fanfiction-Dios... Me haces querer correrme, Viktor. -Puedo hacerlo, Yuuri, de muchas maneras... «En donde Viktor provoca que Yuuri tenga orgásmos que él ni sabía que podían ser provocados.» →Fic completamente de mi autoría. →Los personajes pertenecen a MAPPA...