Jongdae paseaba de un lado a otro de la habitación mientras se cuestionaba si esa mañana no se habría caído en la ducha pisando el jabón y esto solo era obra de su imaginación. Capaz su cuerpo inconsciente seguía tirado en la bañera. ¡Mierda, tenía la mala costumbre de orinar bajo la regadera! Seguramente su cabello estaba impregnado de orina. ¡Qué vergüenza!-No llevamos ni quince minutos juntos y ya te odio. Más que antes -habló Kai que había estado observando en silencio-. Te recomiendo que si tienes algo que decir, lo hagas rápido; tengo en mente una siesta que no pienso suspender.
-¿Podrías tener un poco de consideración? ¡Hay una persona con una crisis enfrente tuyo!
-¡Típico de humanos! -bostezó el Dios- Hagamos algo: yo duermo mi siesta, tú tienes tu crisis y después hablamos, ¿Capisci? -se recostó en la cama de Jongdae-. Antes de irte, cierra la cortina; no puedo dormir con luz.
-¡Hey! ¡¿Qué haces en mi cama?! -se acercó- Te recuerdo que no soy tu sirviente, así que cierra la cortina por tu cuenta.
Pero Kai no le respondió pues ya se había quedado dormido. Jongdae no cabía en sí mismo de indignación y cómo no, si él también venía con planes de siesta. ¡Estúpido Dios, arruinó su tarde!
...
-Bien, déjame ver si entiendo. ¿Me estás diciendo que este tipo durmiendo en tu cama y que usa Gucci es un Dios? -Minseok cuestionó mientras observaba a Kai reposar-. Tengo que admitir que cuando me llamaste diciendo que era algo urgente, pensé que era algo como aquella vez que incendiaste las cortinas de la cocina y tuvimos que salir a buscar unas iguales antes de que tu madre lo supiera o como cuando se te cayó la mochila dentro del inodoro de la universidad en el día del examen de ingreso. Tienes que reconocer que soy un excelente amigo, he pasado mucho por tu causa.
-Yo tampoco tenía escrito “invitar a un Dios a un pijama party en casa” en mi lista de pendientes -se quejó mientras ambos seguían sentados en el suelo observando el sueño del Dios-. ¿Qué va a suceder cuando despierte? Si es que despierta alguna vez.
-¿Cuánto lleva así? ¿Intentaste despertarlo o tienes miedo de cagarte cuando abra los ojos? -se burló-.
-¡¿No eras el mejor amigo del mundo recién?! Esto es serio, Kim Minseok.
-Ya lo sé pero qué quieres que haga, tiendo a hacer tonterías cuando es algo importante -siguió mirando a Kai y estiró una mano para tocarlo-.-¡¿Qué carajo haces?! -le sujetó la muñeca- ¿Quieres que nos mate? ¡Controla tu impulso de idiotez!
-Solo quería tocar su rostro. Tienes que admitir que es guapo. Podría someterme a sus deseos -movió su cejas provocativamente-.
-¡Shhhhhhhh! -lo calló con su manos- ¡Minseok, valoro mi vida! ¡Deja de imaginar su pene y vuelve a ser el más racional de los dos! -rogó internamente que el shock de Minseok terminara o que por lo menos dejara de incluir resultados sexuales-. Ahora, voy a sacar mi mano lentamente y cuando puedas hablar, dirás algo inteligente, ¿sí? 1, 2, 3 -retiró su mano-.
-¿Crees que la tenga grande? Porque su color de piel ya me pone.
-Ok, suficiente. Nos vamos a la cocina -arrastró a Minseok y lo sacó del cuarto-.
...
Por suerte, un capuchino lleno de azúcar y una mojadura de cabeza en el grifo de la cocina devolvieron la racionalidad de su amigo. Ahora estaban sentados en la mesa esperando que la perezosa deidad decidiera honrarlos con su presencia.
-¿Hace cuánto que está durmiendo, Jongdae? -el cuestionado miró su reloj-
-Casi tres horas. Intenté despertarlo antes de que llegaras pero un tronco tiene más vida que él; no queda más que esperar.
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El Dios perezoso (Chenmin)
HumorJongdae se considera a sí mismo como un ser casi perfecto cuyo único defecto es la pereza. Sin embargo, ese pequeño detalle parece dominar su vida hasta el límite en que es lo único que los demás tienen para decir de él. Pero luego de un paseo por u...