supersónico; louis.

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Para Louis, el hecho de seguir existiendo no era más que una paradoja que le mareaba la cabeza.

Llevaba ya diecinueve años vividos, y el aún no encontraba razón alguna para seguir respirando. Algunos días prefería encerrarse en su mundo e indagar sobre preguntas sin sentido, sin respuesta alguna, otros, simplemente dejaba al mundo pasar.

Vivir en un lejano pueblo de un país poco escuchado traía un aburrimiento enorme dentro de su ser, su padre, dueño de un pequeño bar añejo en el centro del pueblo, le había enseñado a regañadientes que, los sueños y deseos jamás se cumplen, porque la felicidad, no era más que una conclusión vertida por varias etapas de tristeza absoluta, y que, en realidad, jamás dejamos de lado a la soledad.

Su madre, sin embargo, le comentó algo acerca de cómo el olvido es la única forma de perdón existente.

Su madre habría muerto meses atrás.

El aún no la olvidaba.

A mediados del 95', cuando él había descubierto el poder de la marihuana y el vino en cartón, sus preguntas fueron respondidas de alguna forma.

Recordaba haber estado leyendo algún libro de Murakami, el frío de Agosto era típico para su región, y mientras las hojas pasaban y el conocimiento fluía en él, algo extraño estalló su corazón.

Un sonido estrepitoso llegaba de las afueras de su casa, su mente, trabajando a mil por hora, trató de entender el bullicio generado por algún transeúnte desquiciado, pero por más que trató, la extraña corazonada que obtuvo lo llevó a espiar por su ventana.

Frente a él, un automóvil ya viejo y descontinuado estaba estático frente a un jardín abandonado, el pobre sol que iluminaba el día, logró dar al castaño una panorámica vista de lo que realmente estaba pasando. A pesar de la vejez de aquella chatarra, el estruendoso sonido que emanaba, le llenaba el alma. La nueva ola de la música lo absorbía, y mientras Oasis sonaba, cantando algo sobre sentirse supersónico y desear tomar ginebra, el mundo le abrió sus puertas. 

Un chico de tez pálida y rizos salvajes tomó por completo su atención, fumaba algo que parecía ser ilegal y cantaba a gritos. Llevaba una enorme chaqueta de cuero negra, botas militares llenas de lodo y un pantalón el cual era atravesado por tachuelas y más cosas filosas, en su ancha espalda, cargaba una guitarra eléctrica, y en su mano derecha, una enorme botella de lo que parecía ser cerveza.

Junto con dos chicos similares a él, recogían algunos escombros en aquel baldío, escombros, que hasta ese momento, para Louis habían pasado desapercibido.

Cuando el rizado alzó la vista, y sus ojos se encontraron con los de aquel chico quisquilloso que lo observaba desde lejos, le fue imposible no alzar la botella que traía en una mano, como dándole un brindis, y mientras el castaño se sonrojaba, la canción seguía sonando.

Fortísimo, al igual que su corazón.

"Necesitas ser tú mismo, no puedes ser ningún otro. Necesitas un modo de expresar lo que quieres decir..." 

boy; larry stylinson.Where stories live. Discover now