Capítulo 12

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Victor: ya te has calmado?- el azabache asintió. Después de un largo rato de silencio, el cual ninguno quería romper ya que pensaban en sus propias ideas, Yuuri fue el primero en hablar

Yuuri: y dime, como es que en todos estos años no diste conmigo si se supone me estabas buscando... por lo que veo, si quisieras pudiste haberme encontrado mucho antes- dijo refiriéndose a que en solo seis meses de darle caza le había encontrado y "capturado"

Victor: en realidad, cuando fuimos allí no préstamos mucha atención a sus rostros cuando escaparon... y... cuando nos dimos cuenta que eran piezas "claves" por así decirlo... comenzamos a buscar información pero no había absolutamente nada con respecto a ti, ni tu edad, ni tu sexo, ni tu nombre, solo sabíamos que te habían adoptado... pero cuando fuimos a buscar al orfanato de donde viniste...- el peliplata hizo una pausa para mirar al omega- el orfanato estaba echo cenizas, nada quedaba ahí...- Yuuri escuchaba muy atento aunque con la mirada baja, ambos seguían en la cama a solo unos centímetros de distancia el uno del otro- solo teníamos información de tu hermana... creímos que si dábamos con ella te encontraríamos, pero tu ya no estabas con ella...

Un recuerdo llegó a la mente del pelinegro en ese momento... levantó la vista, esta seguía perdida pero se dirigía a la puerta de la habitación frente a él

Yuuri: ese día... Mari-nee-chan... Me escondió en un edificio abandonado, me dijo que esperara allí hasta que ella volviera...- los ojos de Yuuri se llenaron de lágrimas sin que este las pudiera detener- ella jamás volvió- dijo casi en un susurro

Victor: lo siento mucho Yuuri- dijo Victor tomando a Yuuri por los hombros para atraerlo hacia sí- de verdad lamentó por lo que tuviste que pasar, pero entiende que es lo que debíamos hacer...

Yuuri: lo entiendo- dijo abrazando a Victor- pero no lo aceptó- antes de que el alfa pudiera hacer algo Yuuri le dio un golpe en la nuca dejándolo inconsciente- duerme un rato en lo que yo me voy de aquí- dijo con mirada fría aun con lágrimas cayendo de sus ojos

...

Yuri: A dónde vamos Yuu-ni- preguntó el rubio mientras corría detrás de ambos pelinegros, Yuuri y Beka

Yuuri: nuestra inesperada visita terminó pequeño, es hora de regresar a casa y empacar

Yuri: nos iremos de nuevo?

Yuuri: así es cariño... esta vez iremos en avión hasta Japón... Que les parece?- preguntó dándole una mirada al rubio y a Beka

Beka: nunca he estado en un avión- dijo imaginando el interior del mismo

Yuuri: les va a gustar mucho, lo prometo.

Oigan ustedes!!... No pueden salir de sus habitaciones!!- dijo uno de los tantos guardias que había en la mansión. Yuuri se acercó hábilmente hasta donde estaba el guardia y le propinó un fuerte golpe en el estómago al pobre beta.

Yuuri: sigamos niños, hay que salir de aquí.

Yuri/Beka: si!

Estaban a solo unos pasos de la salida, habían perdido tiempo valioso ya que se perdieron varias veces entre los muros de la imponente mansión Nikiforov.

Yuuri: vamos niños no se queden atrás- dijo tomándolos de las manos

"Esto no puede ir mejor" pensó Yuuri... pero todo lo bueno puede cambiar en un abrir y cerrar de ojos,  maldijo su suerte, pues los síntomas del celos lo azotaban fuertemente, pero él no iba a ceder.

...

Estando ya en la puerta de salida, y haciendo lo posible y lo imposible para mantenerse de pié sin tambalearse, Yuuri les dijo a los niños que se quedaran detrás del él... así lo hicieron y el azabache abrió la puerta dejando un espacio mínimo como para mirar lo que había del otro lado, sonrió al ver que no había nadie

Yuuri: niños, hay que salir de aquí- los pequeños asintieron y cruzaron el gran jardín frontal que alejaba a la mansión de la enorme reja negra que te permitía salir al exterior.

Yuuri: falta sólo un poco más- dijo volteandose hacia los niños al tiempo que se oía el disparo de un arma... todo paso muy rápido, se escuchó el grito de Yuuri y uno más fuerte que pertenecía a un ya despierto Victor.

Dulce Omega (victuuri)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora