Capítulo 38: Doble cara

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—¿Ya estás listo?— Preguntó Jungkook, asomándose por la puerta de la habitación por cuarta vez.

Pasaba de las dos de la tarde y tenían que estar en media hora en la clínica, pero Taehyung llevaba más de media hora intentando decidir que boina combinada mejor con su atuendo.

—Ya voy.— Murmuró arreglando su cabello castaño.

El azabache largó un suspiro recostadose sobre del umbral de la puerta. Taehyung siempre tardaba en vestirse, era como una chica poco más.

—Amor pero si te ves lindo.— Dijo Jungkook, queriendo irse ya, pues cada vez se hacía más tarde.

Taehyung sonrió poniendo una boina roja en su cabeza para luego ir hasta su novio y besar castamente sus labios.

—Ya estoy.— Sonrió contagiando al mayor, quien besó nuevamente sus labios, ésta vez permaneciendo juntos más tiempo.

—Ya vámonos si no seguro terminamos en otra cosa.— Rió contagiando al menor.

Ambos salieron del departamento luego de que Taehyung se asegurara de dejar suficiente agua y comida para Yeontan y que ninguna de las ventanas, ni la puerta corrediza del pequeño balcón estuvieran abiertas.

—Daré el show el siguiente sábado que viene.— Dijo Taehyung luego de unos minutos de silencio en el auto.

—Mmm...— No le gustaba para nada, pero si Taehyung quería hacerlo no se lo iba a impedir, además debía aprender a confiar en que el castaño lo amaba y no lo dejaría por Jihoon.

O al menos eso creía.

—¿Irás a verme?— Preguntó el castaño, girando su vista hacia él. El  mayor asintió rápidamente.

—Claro que si, no me lo voy a perder por nada.— Respondió. Taehyung sonrió acariciando un brazo de su novio.

—Y... también hay algo que quiero decirte.— Dijo Taehyung llamando la atención del mayor, quien lo miro de reojo unos segundos dándole a entender que siguiera antes de volver a poner su vista en la carretera. —Después de dar mi último perfomance seguiré yendo al club.

La expresión de Jungkook cambió de relajada a seria. No se esperaba que el castaño dijera eso, y la sola idea de pensarlo yendo al club todos los días hacía que se muriera de celos.

—¿Se puede saber por qué?— Preguntó. Su voz contenía molestia.

—Claramente no lo haré como bailarín, si no que me encargaré de hacer los vestuarios de los artistas. Aun no le digo a SeokJin pero seguro le gustará la idea.— Respondió. Apretó sus labios al notar que Jungkook sólo apretó la mandíbula con fuerza.

—¿Cuál es tu insistencia en seguir yendo al club?— Preguntó intentando mantenerse calmado.

—El club me gusta, además quiero poner en práctica mi profesión y está oportunidad es buena.

—No me gusta la idea Taehyung.— Murmuró. —Ok, me gusta que quieras ejercer tu carrera, pero ¿tenía que ser ahí? Hay casas de modas que buscan diseñadores, o incluso podrías abrir
una, yo te ayudo.— Bufo pasándose una mano sobre su cabello. —Quieres seguir viendo a ese mocoso ¿verdad?

—Claro que no, todos en ese lugar son de mi aprecio y son como mi familia además me gusta diseñar cosas extravagantes que van bien con los shows.— Respondió rápidamente. —Si quisiera seguir viendo a Jihoon tú ni siquiera te enterarías.

Jungkook frunció el ceño. Su mandíbula se apretó aun más sintiendo su sangre hervir. No le gustaba en lo absoluto que Taehyung insistiera tanto en seguir yendo al club. Sus celos eran inevitables, no podía evitar sentirse inseguro.

Saudade | KookTae ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora