War of Hormone

I. We are like parallel lines, we are so different.

Londres

Nora's POV

Bajé las escaleras del metro con las maletas y el bolso lo mas rápido que pude, llevaba solo 2 horas en Londres y me las había pasado corriendo.

Al llegar saqué la tarjeta del bolsillo trasero de mis tejanos y la introduje como pude, unos segundos después fijé mi vista en la línea de metro que me llevaba a la universidad, que en ese momento estaba cerrando sus puertas y yéndose. Suspirando me senté en el banco vacío y esperé los cinco minutos que faltaban para que llegara el siguiente.

Abrí el bolso y saqué mi teléfono y observé la foto que tenia de fondo de pantalla, donde aparecíamos Chris , mi novio, y yo abrazados, la foto era de hacía unos 3 meses, cuando habíamos empezado a salir juntos. Estaba metida en mis pensamientos cuando alguien tropezó con mi maleta.

- Dios, lo siento!- Casi chillé levantándome.

- Tranquila, es culpa mía, estoy tan perdido que no sé por dónde piso. - Me dijo rascándose la nuca avergonzado. Le sonreí de lado. - ¿Sabes cómo se llega a la universidad Royal Holloway?- Me preguntó nervioso.

- Sí, tienes que coger este metro, y son aproximadamente 15 minutos de trayecto. - Le respondí. Aunque no estaba del todo segura, eso era lo que había visto las últimas veinte veces que había mirado el Google Maps para comprobar que iba en la dirección correcta.

- ¿Tú también te diriges allí, verdad? - Me preguntó señalando el sobre que sobresalía de mi bolso, donde se podía ver perfectamente en mayúsculas y negrita, el nombre de la universidad. Asentí levemente mientras le sonreía a aquel extraño, de pelo negro, que había sido el más amable durante todo el tiempo que llevaba fuera de casa.

Justo en ese momento un fuerte aire dio a entender que llegaba el metro, así que me coloqué el bolso en el hombro derecho y cogí mis dos maletas grises, me dirigí hacia la puerta, él la abrió y nos sentamos al primer asiento vacío que encontramos.

- Por cierto, soy Jimin. - Sonrió y me acercó su mano tímidamente.

- Encantada, soy Nora - Dije mientras correspondía a su gesto con firmeza, sorprendiéndolo.

Llegamos a la Universidad, Jimin y yo íbamos comentando lo grande y bonita que era, hasta que un chico de cabello castaño y alto, se acercó a nosotros.

-Ey Jimin!- Le dijo mientras se daban un abrazo- ¿Quién es tu amiga?- dijo dirigiéndose a mí, con una sonrisa de lado. Se filtraba sexo y rebeldía con ese pelo corto y castaño y esa pose de chico malo. Levanté la ceja con incredulidad, cuando en ese momento bajó la mirada a mis piernas para llegar de nuevo a mi cara.

- La he conocido en el metro, se llama Nora.

- ¿Quieres que te ayude con las maletas? - Iba a responderle ,hasta que vi como miraba descaradamente el trasero de dos chicas, que le saludaron mientras reían tontamente.

- No gracias, sé valerme por mi solita. -Le sonreí falsamente y puse los ojos en blanco, a la vez que cogía mis maletas y me despedía de Jimin.

Mientras subía el ascensor hacia la 4ta planta y miraba las llaves que hacía 10 minutos me había dado la directora, junto con el uniforme y un "Bienvenida y felicidades por la beca", pensé en el amigo de Jimin y la suerte que tenía de que Chris no fuera esa clase de chicos. El sonido que hizo el ascensor me dió a entender que ya había llegado, al salir observé todo lo que había a mi alrededor hasta llegar a la tercera puerta, empezando por la derecha, y volví a mirar el papelito que colgaba de las llaves para confirmar que esa era mi habitación, cuando divisé el número 113, metí la llave en la cerradura y giré el pomo, la puerta se abrió dejando ver dos armarios a la izquierda, empotrados a la pared, y dos camas al lado opuesto, cerré la puerta y al no ver ninguna maleta ni ningún indicio de que viviera nadie más allí, dejé mis maletas en la cama que daba a la ventana y me dirigí al baño a darme una ducha de agua caliente. Abrí el grifo de la bañera y me hice un moño despeinado agarrando mi pelo corto y ligeramente rizado. Mientras me desvestía pensaba en todo lo que había pasado hoy, y lo único bueno era que tenía la habitación para mi sola y podría concentrarme para seguir sacando buenas notas, mi familia no tenía mucho dinero pero gracias a esta beca podría estudiar aquí y sacarme la carrera de Bellas Artes.

Cerré el grifo y me sequé con una toalla blanca que había dentro del armario al lado de la pica. Me enrollé con ella y salí directa a ponerme el uniforme. Al llegar me paré en seco, tres cabezas se giraron a mirarme, la primera era del chico de las maletas, la segunda de otro chico rubio algo más alto que el primero y la tercera de una chica con mala cara. Ambos me miraron de arriba a abajo, mientras ella me miraba con ganas de matarme.

Genial, esto sí que es hacer una buena entrada.