†45

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Pasaron cuatro días. La relación de ambos mejoraba cada vez más, y se podría decir que por el momento seguían una rutina.

Papyrus despertaba a Sans llevándole un desayuno, hacían los ejercicios, miraban el televisor, almorzaban, hacían más ejercicios, jugaban algún pequeño juego de mesa o seguían mirando el televisor, cenaban, hacían los ejercicios de nuevo, se daban un baño y se iban a dormir.

No era la gran cosa, pero la pasaban muy bien. La puerta ya estaba reparada, pero de todas maneras se turnaban para dormir en una sola habitación, ya fuese la del menor o la del mayor.
Sans todavía utilizaba vendas, pero ya no eran del todo necesarias. Tal vez solo se las dejarían por un par de días más.

Ahora se encontraban viendo programas en el televisor. Ya habían desayunado y hecho los ejercicios. Sans estaba recargado sobre el hombro de Papyrus, mientras este le acariciaba de forma leve el cráneo y por ratos le acercaba galletas a la boca para que las comiese... Papyrus y su manía por el gordo, en fin.

A los pocos minutos se escuchó un sonido de mensaje. Papyrus agarró su celular y lo revisó; era de parte de Alphys.

—Hey, la loca quiere que vayamos a casa de Undyne para hacer unas actividades.

—¿Uhm?

—Creo que se refiere a actividades de confianza o una mierda así. — Lo levantó de su regazo y lo dejó de pie en el suelo.
—Será mejor que vayamos antes que empiecen a chingar.

El mayor asintió riendo un poco. Salieron de la casa tomados de la mano y se encaminaron a casa de la pelirroja.

Aún estaban los chismosos que observaban incrédulos ante eso, ya que esperaban que esa relación que veían en ellos ya había terminado. Otros monstruos solo los ignoraban, y, nadie se atrevía a decirles algo.

Por su parte, Sans caminaba mejor, a paso lento, pero mejor. El menor iba a ese mismo ritmo para que fuesen tranquilos y evitar que el otro se tropezara; de cualquier manera, no le molestaba ese paso.

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Luego de unos minutos llegaron al lugar.

A fuera estaban ambas platicando mientras les esperaban.
Undyne volteó hacia al par y les saludó a su muy amable, manera.

—¡Hasta que llegan, tarados!

—B-bueno, de todas formas no llevamos mucho afuera.

—Tsk, no pasó ni media hora desde el mensaje.

—Bueno, si iban de la manito justo como ahora, entiendo que tardaran. — Rió por aquello.

Los hermanos se avergonzaron un poco. Sans miró hacia otro lado y Papyrus comenzó a darle puñetazos a Undyne en el hombro; ella solo reía más.

—De todas formas, empezemos antes de que peleen. — Dijo Alphys acercándose a Sans con un trapo en mano. Se colocó detrás y le vendó las cuencas.

—¿Qué haces? — Dejó de pegarle a la pelirroja.

—E-es parte de los ejercicios. Aunque se lleven mejor ahora, esto solo es para f-fortalecer más su confianza y tal vez a Sans les sirva un poco en sus traumas.

Let Me Hear You♥[Underfell Fontcest/Sappy]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora