Diez

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Hasta mi madre se ha dado cuenta de que estoy en las nubes.

Pensando en ti. En tus ojos verdes que tanto me cautivan. En tu pelo dorado como el oro y tu sonrisa discreta y tierna a la vez.

Estoy pensando en tu manera de hablar, de caminar. Pienso en la forma que toma tu rostro cuando  te concentras en algo, en esa manía que tienes de revolverte el cabello con los dedos.

Pienso en la electricidad que corre por mi cuerpo cuando me miras.

Es tanto tu poder en mi, que mientras cruzo la calle, no veo el auto que justo en mis narices, pasa como um bólido.

Afortunadamente, el auto pasa delante de mi a escasos milímetros.



Lo que nunca te dije.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora