capitulo 1

23 1 0
                                    

Aun recuerdo la noche en que empezó todo, esa noche que cambiaría mi vida, la que le daría una vuelta de 180 grados y terminaría de cabeza.
Todo empezó aquella noche.

Me encontraba afuera de la casa, eran las siete u ocho de la noche, no me encontraba sola, estaba con mis amigos, era una noche espectacular de esas en las que pasan cosas inolvidables pero nunca creí que me esa noche se marcaría por mucho tiempo.
Mis amigos y yo estabamos sentados en la banqueta, cansados de tanto jugar como niños pequeños, solo disfrutábamos un poco, pues faltaban tres meses para mis 15 años los cuales no esperaba ansiosa apesar de la fiesta que me esperaba, en fin estábamos hablando entre broma y broma, y uno que otro juego  de piedra, papel o tijeras, hasta que lo vimos llegar.

Manuel, llegaba de quien sabe donde a su casa pero no venia solo venia con choco que nunca antes habíamos visto, pensamos que solo era un amigo de el. Manuel entro a su casa dejando a aquel desconocido afuera checando su teléfono, mis amigos seguirán bromeando, en cambio yo por la adrenalina de los juegos de hace un rato levante mi mano para que aquel chico que se encontraba al otro lado de la calle me viera.

—wenas, wenas —dije llamando su atención y bajando el brazo —no mordemos.

El chico sonrió y se acercó me tendió la mano

—hola me llamo Freddy.

No lo vi a la cara solo tome su mano con firmeza y le dije mi nombre sonriendo

—angela, un gusto.

El continuó dándole la mano a mis amigos yo lo seguía con la mirada, escuchando como mi pequeño grupo se presentaba.

—samantha

—karla

—leonarda —dijo mi amigo en plan broma después de unas pequeñas carcajadas se presento correctamente.

El chico se sentó junto a mi, comenzaba a aburrirme así que me levante, tome una piedra y la arroje al piso mientras gritaba "granada!! Todos al suelo" los chicos gritaron y se tornaron al suelo, menos Samantha quien se subió a una camioneta, esa noche no dejamos de hacerle burla.
Así pasamos la noche hasta que nos cansamos y decidimos conocer a Freddy, resulto que era el nuevo vecino, vaya primera impresión, esa no fue la mejor de todas.

Conforme pasaban los segundos, minutos, horas, no lo se perdí la noción del tiempo aquella noche. Mis amigos se metieron uno a uno, solo quedamos Freddy y yo, hablamos sobre cualquier cosa, teniamos muchas cosas en común, pero al mismo tiempo eramos tan diferentes.

Paso mas la noche hasta que mi madre salio molesta a meterme, pregunte que hora era, eran las doce de la noche, recuerdo que unas horas antes le prometí a Freddy que me quedaría hasta las doce, lo cumplí.

—doce de la noche, cumpliste —me dijo sonriendo y despidiéndose —te veo mañana señorita.

Solo me despedí y entre a las casa pensando que había encontrado a un nuevo amigo, jamás habría pensado que ese chico cambiaría muchas cosas y sería más que eso.

fuiste mi primera vez mas bonitaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora