Capítulo 19.

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No señor, lo que vas a hacer ahora será descansar y nada más.


Dicho y hecho, aunque realmente me urgía avisar a Nick sobre el tema de su superior. Tony sí que se había puesto latoso ayer cuando llegamos a la Torre, Pepps se había ido a visitar a sus padres que estaban preocupados por el asuntito ese del mandarín y como habían resultado las cosas, un sinfín de cosas que me perdí encerrada en una ratonera de mala muerte.


Rhodey estaba de visita a pesar de que Tony se mantenía metido en su laboratorio con el Dr. Banner así que era yo quien estaba con él "viendo" la Tv. Jarvis preguntaba cada tanto si debería pedirle a Stark que bajara de una vez pero ninguno de los dos le decíamos que sí, el coronel se mantenía muy contento por mi atención a una historia de war machine, seguro que su mejor amigo poco y nada de atención le ponía, a mí me parecía interesante por el hecho de que yo no muevo ni un musculo en batalla, él si era alguien formidable.


Y luego Vanko controló mi traje desde una computadora en la base del desgraciado de Justin, puse en buenos aprietos a Tony hasta que no recuerdo quien... ¡Ah, sí! La asistente de Pepper consiguió librarme, ahí nos unimos, espalda con espalda para enfrentarnos a una horda de androides asesinos.

Woh, ¿y qué pasó con los otros dos? –bebo un poco de mi malteada de frutilla sin despegarle la mirada, Jarvis apagó el televisor en vista de que nadie lo estaba utilizando. Rhodey aún más emocionado continuó.

Bueno, Ivan llegó con sus látigos de energía a tratar de darnos una paliza y a Justin Hammer se lo llevaban a la cárcel. Utilizamos nuestra táctica láser para ganarle, casi, casi nos tenía cuando lo hicimos, una sobrecarga de energía y todo explotó, así salvamos el día y también así se ganó por fin un beso de la Señorita Potts Tony.

Aww, no sabía que era Pepps la que le daba calabazas a Tony.

No te imaginas cuanto le rogó antes de anunciar que él era Ironman –ambos nos reímos, era bastante agradable el hombre. Stark venía del ascensor junto a Bruce hablando de un suero para mantenerlo tranquilo en momentos desesperados o algo así.

¿Cuál es el chiste? –achina los ojos en nuestra dirección algo sospechoso, me encojo en mi asiento aún con la sonrisa plasmada mientras Rhodes se levanta a estrecharle la mano al magnate. Levanto también mi mano saludando a Banner que me responde de la misma forma – ¿Entonces?

Absolutamente nada de qué preocuparse –aseguro compartiendo complicidad con el moreno sonriente. Los tres se sientan al mismo tiempo iniciando una charla amena. –Se me olvidaba algo importante, ¿Qué tal va todo con Happy?

Está más feo que de costumbre –se interrumpe Tony a sí mismo, blanqueo los ojos mientras los otros dos suspiran. El pobre Happy se había llevado un montón de magullones –y una visita a la cama del hospital- solo por ayudar al idiota cabeza hueca que tanto quiero y aun así se burlaba de él, bueno, es Tony. –Se ganó sus vacaciones el hombre, pronto se recuperará y volverá al oficio como si nada. Nirvana ¿me puedes traer Whisky? Gracias.

–Sí, claro "descansa y nada más" –imito su mensaje de anoche haciendo como si mi mano hablara, me levanto del sillón acomodando el cojín que antes tenía en las piernas – ¿Alguno quiere algo?

Los dos hombres se negaron al ofrecimiento así que marché en busca del dichoso Whisky para el señorito, aunque cuando volví tuvimos una ligera discusión al no querer recibirlo de mi mano, ¿para qué me pide cosas si no las va a tomar? Eich, al final igualmente me lo recibió.

¡¿Avengers?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora