Capítulo 4

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Ya era viernes. TaeHyung se sentía casi decepcionado por no haber tenido ni un contacto cercano con JungKook más que algún que otro cruce de miradas en los pasillos o en las clases que compartían. TaeHyung llegó a pensar que estaba loco cuando le parecía que el menor lo estaba mirando fijamente mientras escribía sus notas. Pero JungKook sí lo miraba y de hecho, casi todo el tiempo. Le encantaba ver como su seño se fruncía ante alguna cosa que estuviera en su cuaderno y la rapidez con la que escribía en el. Notaba cada vez que sus muslos se marcaban debido a sus intentos de ponerse más cómodo en los pupitres del salón.

JungKook ya había hecho su siguiente movimiento, así que ahora solo esperaría a que resultara beneficioso para él. La campana sonó y los alumnos recogieron sus cosas para salir del lugar. Esa sería la última clase, por lo que eran libres durante el fin de semana. JungKook salió disparado por la puerta y TaeHyung sólo logró ver su mochila desaparecer por la puerta. JiMin se acercó a él de manera rápida y su lenguaje corporal le dijo al castaño que el más bajo estaba emocionado.

-Adivina que... -JiMin sonrió en grande, haciendo de sus ojos dos pequeñas líneas. -ChanYeol me hizo llegar una invitación a una fiesta en su casa esta noche. -El rubio casi estaba saltando en un pie.

-Ah, ¿si? -TaeHyung no podría estar menos interesado, no le gustaban las fiestas.

-Ajám. Parece que sus padres se fueron a la graduación de su hermana en Seúl y tendrá su casa para él. Y tu y yo vamos a asistir. -JiMin no estaba preguntando y TaeHyung ya sabía de antemano que no tenia opción: iban a ir a esa fiesta.

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JiMin se encargó de que TaeHyung se vistiera decentemente para una fiesta de ese estilo y que no llevara unos pantalones de chándal y una camiseta de The Beatles. Había conseguido entre el montón de ropa del armario del más alto unos jeans negros y una camiseta blanca, convinados con una bonita chaqueta y unos zapatos negros. Lo hacían ver simple pero muy bien al mismo tiempo.

JiMin era mucho más exhibicionista, por lo que a TaeHyung no le sorprendió que saliera del baño con unos pantalones de cuero muy ajustados y una camiseta sin mangas adornada con un pronunciado escote V. JiMin siempre vestía para impresionar y sí que lograba su cometido. Siempre atraía la atención de muchos chicos y chicas donde sea que estuviera. TaeHyung admiraba mucho eso, el jamás podría ser así. Estuvieron listos para salir después de arreglarse el cabello y de que JiMin les aplicara un poco de maquillaje.

Convencer a la madre de TaeHyung no fue nada difícil; la mujer estaba encantada de que su hijo saliera un poco y no estuviera encerrado todo el tiempo en su habitación, leyendo y jugando en Internet. Ella misma les dió dinero para que pudieran pagar el transporte en caso de cualquier complicación para regresar y los despidió con una sonrisa, deseándoles mucha suerte. TaeHyung no quería ir y no podía sentirse más desanimado hasta que algo hizo clickear en su mente.

Era una fiesta, y una de las que Park ChanYeol organizaba. Lo que significaba que todo el mundo estaría ahí. Y más aún los del equipo de fútbol de la preparatoria. Incluido Jeon PlayboyKook. TaeHyung abrió los ojos como platos. ¿Por qué no lo había pensado antes? Era obvio que estaría allí pero, ¿eso debería preocuparle? Había estado fingiendo que nada había pasado entre ellos dos durante toda la semana así que, ¿por qué sería diferente?

Después de bajar del tren, solo tuvieron que caminar unos pocos metros hasta la conocida casa de los Park. Y no, no la de Park JiMin. El moriría por tener una casa como la de ChanYeol. Siendo justos, cualquiera lo haría. Con tres pisos de puro lujo, dos terrazas enormes, un patio trasero increíble con una piscina que de seguro era del tamaño de la casa de TaeHyung, ChanYeol vivía en lo mejor de lo mejor y sin ningún tipo de restricción. Era quien casi siempre organizaba las grandes fiestas del instituto y sus padres se lo permitían. Un niño bastante mimado, pensaba TaeHyung.

La casa estaba llena de luces de colores, con la música alta y gente por todas partes. JiMin fue quien pidió para pasar pero nadie se negó a que lo hiciera; cuanto más gente, más grande la fiesta. TaeHyung traía las manos en sus bolsillos, incómodo en el lugar lleno de humo y aroma a alcohol. Definitivamente no era la atmósfera favorita del castaño. Pero se olvidó de absolutamente todo en cuando lo vio.

¡Estamos en la biblioteca! ♤KookV♤ 1st VERSIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora