Capítulo 18__Te atrapé.

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sentí una extraña sensación, me sentía observada, miré a mi jefe y él solo hablaba con su acompañante

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sentí una extraña sensación, me sentía observada, miré a mi jefe y él solo hablaba con su acompañante.

Mi vista se posó en aquellos dos hombres, sentí como mi respiración se detuvo por completo y mi estómago se volvía un nudo.

Rodrigo estaba ahí, frente a mi, sus ojos marrones sobre mi.

Una media sonrisa se crispó en sus labios. Volví mi mirada a Eduardo y ni al caso, aún seguía hablando con aquel sujeto sentado junto a él.

- Oh, Meier, él es Rodrigo, próximo socio que estará ubicado en Chicago.

pasé saliva al escuchar, Rodrigo por fin había conseguido el ascenso que tanto había deseado. Todo este tiempo separados con el fin de lograr lo que se proponía había resultado.

Mi jefe se levantó de su asiento, mi prometido y él, se estrecharon la mano con cordialidad.

-Eduardo Meier, presidente de Meier incorporation__ él le ofreció asiento, Rodrigo solo me miraba, Eduardo al notarlo posó su mirada en mi__ ella es Pilar González, mi asistente __ me presentó__

-Si ya...

-Un gusto señor Rodrigo Silva__ tendí mi mano para saludarlo, torció el gesto y estrechó mi mano con suavidad__

Si las miradas mataran... están invitados a mi funeral.

- La asistente más hermosa que he visto__ una sonrisa boba se escapó de mi, misma que se borró cuando vi otros ojos que parecían fulminarme__

-¿Qué gustas tomar?__ evadió aquel comentario__

- amm...Vino blanco__ pidió, el sujeto que estaba junto a él asintió la elección__

-Vino blanco entonces

Los dos comenzaron a intercambiar planes de las respectivas empresas para las que trabajan.

Me sentía sumamente asquerosa, incómoda, no quería estar en ese lugar, no soportaba escuchar sus voces tan cordiales entre sí, no soportaba que Meier me mirara como si fuese de su propiedad.

No me quedaba más opción que esperar pacientemente.

El señor Montes invitó a Eduardo a un lugar apartado. Mi jefe acomodó su camisa, me dedicó una mirada y fue detrás del otro empresario.

-¿Ahora sí podemos hablar?__ Rodrigo pregunta con amabilidad __

Asentí y me levanté de la mesa. Lo seguía mientras a cada paso sentía que me ahogaba, estaba nerviosa, demasiado, aún así debía fingir que estaba como la Pilar que él conocía.
Nos sentamos en un escalón no muy lejos del restaurante.

- Amor ¿te encuentras bien?__ preguntó tomando mis manos _

-Si, no...Me esperaba encontrarte aquí, no me habías contado sobre éste viaje

Rompiendo Tus ReglasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora