CAPITULO 212: ENCUENTRO

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En las afueras de Siam, en su finca de campo Noh sentado en una de las butacas de su sala de estar que colindaba con aquel amplio y verdoso jardín de su casa. Leyendo el diario local con su mano derecha mientras que su izquierda bebe un sorbo de té, es interrumpido por su madre quien sutilmente se sienta a su lado...

- "Cuánto ha crecido mi pequeño hombrecito..."

Noh mira a su madre. Posa la taza de té sobre la pequeña mesita de estar para apoyar sujetándo la otra parte del diario. Momentos como ese eran siempre comunes en una familia que como todas en su mayoría gozaban de una buena comunicación.

- "Mamá..."
- "Eh?
- "No sigas, me sonrojas."
- "Oye..! No seas bobito. Por qué deberías de sentir vergüenza, eh? Soy tu madre y tengo derecho a decir eso."
- "Lo sé mamá. Sólo que aún me ves como un niño cuando en realidad yo ya no lo soy..."
- "Pues para mí seguirás siendo 'mi niño'. Además, siempre has Sido bastante directo con tus cosas incluso no sentiste vergüenza cuando declaraste que estabas enamorado de Phun como para que ahora vengas a decirme que 'te da pena'(vergüenza)."
- "Son dos cosas totalmente diferentes mamá..."
- "Tú crees eso?"
- "Pero por supuesto que sí"
- "Puede que sí, pero no vas a negarme de que no la sentías..."
- "Tskk..."

Ese sonido de desaprobación hecho por el muchacho no es tomado de buena manera por su madre quien de un ligero golpe, toca la parte derecha de su hombro...

- "Mamá..!!"

Mientras Noh expresa su malestar por el acto de su mamá, ésta se levanta de aquel lugar.

- "Chiquillo insolente. Será mejor que te vayas a pegar una ducha. Tienes visita."

El muchacho extrañado ante el anuncio de su madre no concibe respuesta. Visita? Quién? Estaba lejos de la capital como para que una situación así ocurra. Y no es por que sus amigos no pudieran o quisieran visitarlo. El asunto radica es que ninguno de ellos había anunciado con antelación su llegada a casa...

- "Visita? Quien?" - Preguntó Noh....
- "Es una sorpresa..."

Noh, quien detestaba las sorpresas estaba ansioso por saber la identidad de aquel visitante que se hallaba en su casa. Deja el diario a un lado y se levanta lentamente. Bañarse? Para que? No era necesario. No estaba dispuesto a recibir de buena manera a alguien que hasta ese momento no sabía su identidad y de paso era solo eso, una visita.

- "Dónde está esa persona, mamá?"
- "En la biblioteca."
- "Ok, iré a ver quién es."
- "Por cierto..."
xx

- "Hacía tiempo que no veía a este chico. Eres un desconsiderado al no traerlo más seguido a nuestra casa" - Continuo la señora quien, en sus ojos se le notaba lo feliz de la visita

Noh intrigado cruza el umbral de la sala para dirigirse a la biblioteca. Sentado y regio como siempre, quien menos esperaba yacía de piernas cruzadas recibiendole con su característica sonrisa...

- "Phun..."
- "Hola."

Noh respira profundamente. De la incertidumbre hasta hace poco, su cara cambió a una leve molestia. Estaba claro que la presencia de su ex en su casa no era bienvenida.

- "Jooo... Por lo menos deberías disimular tu rabia no?" -Replicó Phun mientras se llevaba el caso de jugo a la boca servido hace poco por la servidumbre de la casa.

- "Qué haces aquí?"
- "Visitandote. Puedo supongo aunque en tu caso y viendo tu reacción es más que elocuente que más que mi visita, el verme te molesta."
- "Deja de decir tonterías. Debiste haberme avisado que vendrías."
- "Debería? Aunque si ahora en mi cara me demuestras un grado de inconformidad... Quien me garantiza que sí te llamaba con anticipación me recibirias como es debido?"

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