Capítulo 1

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El sol radiante se refleja en el pavimento como un espejo rallado por los pasos. La gente pasa como hormigas para llegar a la colonia, controlados y dirigidos por caminos creados por ellos mismos. Yo soy parte de las hormigas, siendo obligado permanentemente a seguir una rutina que dudaba tener una vez. Con un lado del auricular en el oído, escuchando los mensajes que me dejaron mis compañeros de trabajo diciéndome que es lo que tengo que hacer, pero bueno, supongo que eso es lo malo de ser el bueno en la parte laboral, todos te consideran su "último recurso" para completar un objetivo que ellos no pudieron a tiempo o para darte tareas que ellos no quieren hacer.

Me siento en una banca cercana para descansar mis piernas después de estar caminando unos treinta minutos hacia el edificio donde vivo. Mi camisa blanca está totalmente mojada por mi sudor, pero el saco que tengo lo cubre casi por completo, dejando libre la parte del pecho. No tengo un buen estado físico, ni tampoco una alimentación óptima, aunque no los necesito para subsistir. Miro mi teléfono que se me hace casi imposible por la cantidad de iluminación que da el cielo soleado, por lo que me veo obligado de subirle el brillo a pesar de la baja batería que tengo. Utilizo mi móvil solo por mero entretenimiento. Ojeo un poco la sección de noticias y me entero que hay varias protestas contra el gobierno en las principales avenidas, haciendo diversos paros. No me importa mucho el tráfico, pues la paga que me dan no inspira ahorrar para llegar al auto, además de la inflación en el combustible.

Después de unos minutos me vuelvo a parar y seguir mi ruta. Me planteo si en realidad quiero un cambio de vida, porque las cosas podrían estar peores, tal vez sin trabajo, o casa, o mucho peor, una familia que no puedo alimentar, aunque vivo con la fortuna de ser soltero. De todas maneras, quiero una mejora en mi sueldo mensual, a pesar de mi trabajo actual, un oficinista en una empresa de bienes raíces. Pero toda mi nube de pensamientos e ideas son eliminadas por un sonido de disparo que escucho en la distancia. Escucho gritos, gente corriendo con sus hijos y autos tocando sus bocinas. Reacciono junto a ellos y me dirijo con rapidez a mi edificio, que quedaba a unas cinco cuadras de donde yo estaba. Lo único que tenía en mi cabeza era que tenía que correr como si mi vida estuviera en riesgo. A lo lejos escucho más disparos, como de una pistola en disparo rápido, o de varias disparando al mismo tiempo.

Después de unos minutos corriendo llegué a mi edificio. Entro en mi departamento, suelto mis cosas, tiro mi saco, mi corbata y me siento en el sofá de la sala. Pasaron segundos de mirar a la nada cuando se me pasó el pensamiento de "¿Qué hubiera pasado si yo estaba en el lugar del tiroteo?", "¿Hay muertos? Si los hay ¿Cuántos?", "¿Podía morir?", creo que el momento donde uno está al borde de la muerte es donde realmente se valora la vida. Quería tranquilizarme así que puse la tele. Realmente me esperaba que los canales que gobernaban en transmitir información hablarían del suceso de hoy, pero para mi sorpresa ni un solo canal lo transmitieron, ni un solo comentario, o al menos eso estaba viendo a lo que iba viendo. "Tal vez luego lo transmitirán" fue lo que pensé, pero un tema tan importante como las vidas de los ciudadanos en el estado son tan importantes que no tenía sentido no publicarlo lo antes posible. Toda esa información me puso a pensar, aunque no quería prestarle atención porque sabía que yo no tenía nada que ver. Así que me di un baño y me fui a dormir, esperando que mañana todas las dudas sean resueltas. 

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