Trapped \\5SOS//

Auch.

Corro con la bolsa hasta la furgoneta, y tras el cristal, veo a Mike riéndose tanto que diría que se está ahogando.

-¿De que te ríes hijo de puta?-Dice Calum mirándolo.

-Nada, nada... ¿Los has elegido tu, Calum?-Pregunta observando la caja.

-Si, te conozco demasiado bien, y un día sin querer entré al baño y estabas meando.-Explica Calum, esa información sobra la verdad.

-Yo como comprenderás no se el tamaño de tu pene joder.-Digo en un suspiro.

-Dejemos este tema y vayamos a casa anda.-Dice Calum riéndose.

Llegamos a la casa y Luke está con Ash en la cocina hablando.

-Buenas.-Digo sentándome al lado de Luke. Hace un mal gesto apartandose un poco de mi.

-Oye Luke, ¿Podemos hablar un momento?-Le pregunta y el asiente con la mirada.

*Narra Luke*

Me levanto del taburete bajo la mirada de los demás y sigo a Cal hasta mi habitación.

-¿De qué quieres hablar?-Pregunta a la vez que yo me siento en mi cama.

-Se que piensas que tengo algo con Rachel por lo de anoche, te juro que sólo fue una apuesta.-Dice poniéndose delante mía. La rabia me puede en este instante. Me abalanzo a él dándole un puñetazo en la cara.

-No soporto que me mientas Calum, se que sientes algo por ella.-Digo amarrando sus muñecas al suelo.

*Narra Rachel*

Oigo un estruendoso golpe en la habitación de Luke. Subo seguida de Mike y Ash para ver que pasa. Abro la puerta y veo a Luke encima de Calum, pegándole.

-No Luke en serio, relajate.-Dice Calum con el labio sangrando.

-Luke tío, ¿que coño te pasa?-Digo intentando quitar a Luke de encima de Calum.-LUKE, HE DICHO QUE PARES.-Al decir eso, el brazo de Luke se alza y me da en la mejilla. Me aparto cayendo al suelo.

-Mira lo que has hecho joder.-Dice Calum levantándose quitándose a Luke de encima.

-Ra... Rachel, lo...lo siento.-Dice girandose hacia mi.

-Me duele mucho hostia.-Digo levantandome con ayuda de Mike.

Me he pasado toda la tarde con una puta bolsa de hielo en la mejilla, al menos me ha bajado el hinchazón.

-¿Como esta mi pequeña pitufina?-Pregunta Mike entrando con una bandeja.

-Mal, Mike, vete.-Digo de mal humor.

-Se que no sólo estas cabreada por que te haya dado en la mejilla, dimelo.-Dice sentándose a los pies de mi cama.