Entro en el gimnasio y aún no ha llegado nadie, sólo está la entrenadora colocando los sacos y un par de cosas más. La saludo con la mano y voy al vestuario a cambiarme. Me pongo un culote demasiado corto y apretado para lo que suelo llevar y una camiseta negra básica, y mis deportivas blancas. Salgo y todos los chicos entran al vestuario, en la puerta me encuentro a Calum, que me saluda guiñandome el ojo. Antes de que salgan, empiezo a darle un poco a un saco con instrucciones de la entrenadora.
-Anda, si la barbie sabe darle.-Dice Wes, Wes Collins, el gilipollas.
-Wes, cállate que te comes el puto suelo.-Digo dándole al saco el último puñetazo, haciendo que el saco se caiga.
-Venga chicos, hacer equipos, ya que sois pares.-Dice Alice pitando con el silbato.
Hacemos equipo, me elijan la última, como ya me esperaba, pero al menos, no me toca con Wes. Uno por uno empiezan a darse, vamos empate, y sólo quedo yo y Wes, es decir, le voy a dar lo que se merece.
-Waterson, Collins, al rin.-Dice Alice.
-Ohhhh hola princesa.-Me dice preparándose los guantes mientras mi mira las tetas.
-Ohhhh hola Ken.-Digo bebiendo agua.
Empieza la lucha y a mi no me toca, sólo se lleva hostias mías. No se como me toca el culo y en 2 segundos estoy en el suelo con el encima.
-Así me gustaría estar contigo pero sin ropa fiera.-Dice sonriendo con picardía.
-Ya te gustaría, apuntalo para Navidad.-Digo poniéndome yo encima y empezando a darle en toda la cara. Ya sangraba cuando Alice me aparta de el, si no es por ella, lo dejo en coma.
-Hostia puta, que eres ¿Familia de Hulk?-Me susurra Luke desde las cuerdas.
-No tranquilo.-Digo dándole dos besos.-Voy a cambiarme.
Corro al vestuario y me cambio con lo que llevaba antes, en el pasillo de los vestuarios Wes me corta el paso poniéndome contra la pared.
-Me has dado de lo lindo.-Dice riéndose, aún que en sus ojos se ve ira.
-La próxima vez que pienses en tocarme el culo, piénsalo 2 veces.-Digo quitándomelo de encima. Salgo para encontrarme con Luke e ir a tomar el café que me había prometido. Llegamos a la cafetería del internado y nos sentamos cada uno con su café en una mesa.
-¿De qué querías hablar?-Le pregunto apagando la pantalla de mi móvil.
-Mira, Ash nunca a sido el mismo desde que la zorra de Molly le engañó, pero desde que se chocó contigo en el pasillo, no para de hablar de ti, pero hablar con una sonrisa y brillo en sus ojos que nunca había visto en él.-Dice y yo me sonrojo un poco, pero yo no puedo sentir nada por nadie.-El caso es que si no te gusta, no le ilusiones, por que luego se hundirá, y le costará mucho volver a levantarse.
-Luke, yo no puedo saber si siento algo por el en tres días.-Digo después de pegarle un sorbo a mi café.
-He visto como lo miras, como ríes con sus muecas y como te sonrojas con él, tengo un amigo en el insti al que ibas, y me ha contado como eras, fría y nunca nadie te había visto sonreír.-Al decir eso miro mis muñecas.-¿Te cortabas por imbéciles?
-Lo he pasado bastante mal, no está muy bien visto que tus padres sean yonkis, ya que tienen como hacerte daño.-Digo aguantando una lágrima.-La gente no tiene vida y se mete en la de los demás, simplemente.-Digo sin aguantar la puta lágrima.
-No llores, a mi me enseñaron a no llorar nunca por nadie que no llora por ti.-Dice cogiendo un servilleta y limpiandomela. Nuestras miradas se cruzan y una sonrisa inconsciente sale de mi.
-No tengo pensado llorar.-Digo seguido de un mensaje de Ash.-Ash me dice que si esta noche a las diez en vuestra habitación, ¿Qué le digo?
-Hombre no tienes nada que perder, por que la virginidad desde luego que no.-Dice y le pego un golpe en el hombro.
-Que gracioso, voy a mi habitación a cambiarme.-Digo dándole dos besos.
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Trapped \\5SOS//
Hayran KurguRachel Waterson, loca, psicópata, piromana, una adolescente que se prometió a si misma no enamorarse nunca desde lo que ocurrió en su instituto. ¿En este internado romperá su promesa? Y si la rompe...¿Lo pagará caro?