El hijo de Hades y Persefone [1.3]

Capítulo 5| Castigos

A P O L I Ó N
💀💀💀

Un enorme bollón con un montón de papeles estaba sobre la mesa frente a mi mientras todos estaban sentados en la sala que habíamos acomodado para que sea el lugar donde se diría el castigo. Helen mezclo los papeles nuevamente en el bollón transparente y puse mi mano dentro el primer castigo seria para Diana. Desdoble el papel que contenía uno de los tantos castigos que pusieron todos los que no estaban relacionados con la pelea de hoy.

Lavar la ropa de toda la fraternidad por un mes.

– Diana tu castigo es lavar la ropa de la fraternidad por un mes – la castaña se puso de pie con enojo y maldijo por lo bajo queriendo salir de la sala pero volvió a sentarse.

Helen volvió a mesclar los papeles nuevamente y me dejo el bollón frente a mi permitiéndome tomar otro papel, estaba vez sería el castigo de Alysa. Desdoble el papel bajo la mirada indiferente de la cabeza de uva que enrollaba su cabello en su dedo.

Limpiar los cuatro baños de la fraternidad por un mes

– Alysa tu castigo será limpiar los baños de la fraternidad por un mes – las risas inundaron la sala y la nombrada se fue pisando con fuerza.

La hija de la diosa del amor volvió a mesclar los papeles y dejo que metiera la mano en el bollón sacando el castigo para Ylenia. Mire por un segundo a mi prima y su cabello se volvió de un color azul claro, desdoble el papel y leí su castigo.

Limpiar el ático de la fraternidad

– Ylenia tienes que limpiar el sucio ático de la fraternidad el cual no se limpia desde que se inauguró la casa – mi prima asintió y se fue de la sala junto con Adonis.

Por ultimo estaba Maya esperando cómodamente sentada viendo como el bollón era mezclado una última vez por Helen. Tome un nuevo papel y esta vez esperaba que las cuatro aprendieran la lección.

Ordenar todas las habitaciones de la fraternidad por un mes

– Maya tu castigo es ordenar las habitaciones de toda la fraternidad por un mes – la rubia asintió saliendo de la sala dando por terminada la sentencia. Todos volvieron a sus actividades y Diana se dirigió hacia mi sé que está enojada por su castigo, pero no puedo hacer favoritismos.

– La pelea fue algo extraña sentía como si la tontería del baño fuera lo peor del mundo – Diana dejo caer sus hombros moviendo su cabeza en forma de negación – Me prestas tu motocicleta no pienso llevar la ropa de todos caminado – extendió su mano esperando que le de las llaves de mi preciado medio de transporte. Con algo de duda saque las llaves de mi bolsillo por lo general no dejaba que nadie manejara mi moto a excepción de Diana es la única que sabe andar yo mismo le enseñe para su cumpleaños número dieciséis.

– Espera dijiste que lo del baño fue una tontería que sentiste que era lo peor del mundo esto solo puede ser obra de... – intente analizar mis propias palabras esperando que no sea Eris quien se haya querido volver una universitaria a estas alturas. Pero en ese momento recordé a quien le agradaba más el caos que una manzana recién sacada de un árbol