ｓｅｒｅｎｄｉｐｉａ

Capítulo Ocho

[Sehyoon's POV]

Tragué en seco al escuchar las palabras de mi compañero, a pesar de que lucía bastante tranquilo y había tenido un tono amable al expresarse, su reacción el día anterior no había sido la mejor, así que efectivamente no sabía que esperarme. Asentí de forma leve y miré a Jun alejarse del comedor, volteé mi vista hacia mi pareja que había dejado de comer y solo miraba el recorrido que había dado el chico que con anticipación había abandonado la gran sala, dejé escapar un gran suspiro, y busqué una de sus manos para acariciarla y darle una sonrisa corta, en muestra de apoyo, logrando que el chiquillo carcajeara, tierno, y continuara con su desayuno.

– ¿Crees que siga molesto? –Byeongkwan se atrevió a preguntar, con la mirada bastante despabilada.

– No puedo decirlo con exactitud, pero no lo parece, ambos sabemos que no puede disimular esos sentimientos, y esta vez estuvo muy calmado –Hablé en tono bajo y continué concentrado en el contenido de mi plato.

– Sehyoon –Oí mi nombre salir de la boca del peliverde y llevé mi mirada hacia él– Aunque nuestra relación cause muchos problemas, no pienso dejarte, quiero que tengas eso claro –Un leve sonrojo se posó en sus mejillas.

Les puedo jurar que este pequeño es un ángel, no hay otra explicación para una existencia tan etérea y preciosa.

– No pienso dejarte aunque pasen miles de cosas que no queramos, porque sé que podremos buscar soluciones juntos –Levanté una de sus manos para luego depositar un beso en el sitio.

Él apenas me regaló una sonrisa y se levantó de la silla, observé su figura siendo resaltada por los rayos de luz que se filtraban por la ventana cubierta con finas cortinas, mi pequeño compañero lucía delicado, como si tuvieses que tener mucho cuidado para no hacerle daño, y esa impresión no era errónea, sabía lo sensitivo que Byeongkwan podía llegar a ser, y aunque sentía miedo por mi tosquedad ante aquel deleznable corazón, daría lo mejor de mí por él.

– ¿Qué tanto me miras, cielo? –Pronunció el menor y ocultó sus ojos instintivamente por una risita que se escabullía de sus labios.

– Estoy pensando en lo afortunado que soy al tenerte –Sonreí de lado.

– Coincido en tener ese sentimiento, cada vez que te abrazo, o que estoy cerca de ti –Infló un poco sus mejillas– Vamos a lavar los platos y cubiertos, y así hablamos con Jun, ¿Te parece bien?

– Estoy de acuerdo, lindura.

[Donghun's POV]

– Entonces, ¿Solo entraste ahí y les dijiste que querías hablar con ellos? ¡Cielos! A veces me sorprende lo audaz que eres, yo en tu situación habría tardado mucho más en poderles hablar, siempre los aconsejo y nunca tomo mis propios consejos para dar mis opiniones de vez en cuando –Reí suave, y le acaricié un hombro a Jun.

– No quiero que vivan pensando que los odio o algo así, Hyung, debo enfrentar mis asuntos y mejorar como persona, es parte de crecer – Exteriorizó el pelinegro, calmado en gran manera.

– Y después el viejo soy yo –Carcajeé de nuevo – Estoy orgulloso de todos ustedes y lo mucho que han crecido este año, logran cosas increíbles que hace un tiempo ustedes mismos veían imposibles.

– Es gracias a la unión que tenemos, y por eso no puedo romperla, la conexión que nos une a todos –Acomodó un poco su cabello.

Al instante Sehyoon y Byeongkwan entraron a la gran pieza donde nos encontrábamos y luego de tomar asiento, juntos, y de tomarse las manos, miraron con quietud su alrededor.