ALMAS GEMELAS [YURI]

LO QUE PASA CON MADDY....

                                                                MADDY:

Después de aquel encuentro con Lony en el callejón fui corriendo a casa. Al llegar me paré mientras jadeaba y recuperaba el aliento. Entré asusta en casa porque no sabía lo que me iba a esperar.

-Mamá....ya estoy en casa- dije mientras tartamudeaba-.

Mi madre apareció con una expresión de gran furia.

-¿Donde demonios estuviste?- me preguntó con un tono de enojo-.

-Es-es-es que el profe....-

-¡No me cuentes mentiras!- me gritó-.

En ese momento estaba temblando.

-Va-va-vale estaba hablando con una amiga y solo me retrasé unos minutos, pero nada más- le conté la verdad-.

No dijo nada y se acercó a mí, me cogió del cabello.

-Como me entere que estás andando con alguien lo pagarás muy caro- me advirtió-.

Asentí mientras sollozaba.

-Tu padre está hecho una furia por tu atraso, súbete a tu cuarto y no quiero escucharte llorar- me dijo-.

Me soltó y fui caminando poco a poco a mi habitación, al llegar cerré la puerta y me deslicé por la puerta para llorar en bajo.

Sí, mis padres eran así, no les gustaba que anduviera con nadie. Ellos me ven como un monstruo excepto a mi hermana mayor, Lidia. A ella la ven como a una consentida, pero no saben la de cosas que hace cuando ello no están en casa. Para ellos soy una niña no deseada.

De repente alguien toca bruscamente mi puerta, me levanto con miedo para abrir la puerta. Era mi hermana mayor, me empujó para que entrara y acorraló en la pared.

-¿Qué coño has hecho ahora Maddy?- me preguntó enfurecida-.

-Nada que te importe Lidia, así que déjame en paz- le contesté-.

-Si no fuera por ellos te estaría dando palizas, ¿como te atreves andar con alguien?- me preguntó-.

-¿Y me lo preguntas tú?, que sueles traer a chicos cuando papá y mamá no están en casa- le dije-.

Esta no le gustó lo último que dije así que estampó una bofetada en mi mejilla.

-Ten cuidado con lo que dices perra- me amenazó-.

Después de eso salió dejándome sola. Siempre he pensado a veces que pasaría si me suicidaría, sería libre de este mundo cruel en el que vine, sin amor y felicidad. Me tumbé en la cama, pero enseguida decidí hacer las tareas que me mandaron y a estudiar.

Sí, siempre que llego tarde mi madre me castiga sin comida, por eso estoy acostumbrada a no comer. Al terminar mi madre entró con un plato que tenia un trozo de pastel, se acercó y me miró con desprecio. Pero cuando iba a irse miró mi roja mejilla y la cogió sin cuidado.

-Eres muy torpe- me dijo y escupió en el suelo-.

Antes de irse observó la habitación.

-Está todo sucio, como vuelva y lo vea así te llevarás un gran castigo, estúpida- me amenazó-.

Asentí con un suspiro pesado y cerró la puerta bruscamente.

Era todos los días así, desde pequeña mis padres siempre decidían por mí sin contar mi opinión. Siempre deseo que esto fuera una pesadilla 

(....)

Ya era de noche, observaba la oscura noche, miré la hora y marcaban las 10 pm, tenía que dormir así que me puse mi pijama y me acurruqué en las mantas. Acaricié mi gato de peluche y cerré los ojos cayendo en un profundo sueño.