[7]

7.9K 691 596
                                    

No sabía dónde me encontraba, no sabía dónde estaba mi hijo, no sabía qué pasó.

Hasta que me encontré con los ojos de Jungeun.

– ¿Dónde está mi hijo?– Pregunté, sin dar vueltas.

No quería verla, no quería escucharla, no quería tocarla, no quería estar en la misma habitación que ella, no quería ni siquiera respirar el mismo aire que ella.

– Hola, Minho...– Comenzó– ¿Ni siquiera vas a decirme hola? ¿O agradecerme por haberte dejado con una peste como esta así no te sientes solo?– Señaló a Chenle detrás suyo.

– ¡Chenle!– Quise correr hacia el, pero me ahogué. Tenía una cadena amarrada al cuello, como si fuese un perro.– Déjalo ir, no sé qué quieres, pero déjalo.

– ¿Acaso no sabes de mi vida?– Soltó una carcajada sarcástica– Bien, ya que no vas a salir de esta pocilga nunca más, te contaré...– Hizo una pausa, mirando con asco el lugar en donde me encontraba.– Pertenezco a una de las mafias más famosas de Asia. Te dejé a este niño porque no lo quería, sería una distracción. Ni siquiera quería un hijo, pensé que no podía tenerlos, eso me dijo mi madre...– Tu madre es una tonta si no te hizo estudios pensé.– Pero me mintió. Tuve que gastar mis vacaciones de un año por aguantar a tu hijo por nueve largos y horribles meses yo sola...–

– ¿Por qué no me llamaste? Pude haberte ayudado.– Le interrumpí.

– Porque no quería verte, es más, ahora mismo me asquea el hecho de tenerte enfrente mío.

– Sí, a mí igual...– Susurré.– pero bueno, entregame a mi hijo y no te vemos nunca más.

Se rió de nuevo, esa risa que tanto odio y que tanto desprecio llenaba mis oídos.

– Querido Minho, tan iluso e indefenso...– Empezó a acercarse a mí– ¿No sabés qué es lo que quiero de ustedes aún?– Negué rápidamente.– Bien, tengo que irme.

– Espera– La agarré de la muñeca. Voy a tener que cortarme esa mano cuando esté libre.– ¿Qué es lo que quieres?

– Changbin, hazle saber qué es lo que quiero a este niño de una vez por todas.– Dijo mientras miraba al nombrado y se fue.

Seo ChangBin.

Lo recuerdo perfectamente bien. Éramos grandes mejores amigos en la escuela primaria hasta que dejó de hablarme por juntarse con un grupo de maleantes.

– Hola, Minho...– Comenzó a hablar, se escuchaba inseguro.– supongo que me recuerdas

– Ah sí, el único amigo de mi infancia que lastimó sin piedad mi frágil corazón, yendo con un grupo de inservibles.– Dije seguro.– ¿Cómo olvidarlo?

– Bien, una disculpa no vale nada ahora.– Bajó su mirada, maldito mafioso no intimidad a nadie así.– No estamos para hablar de eso. La jefa Jungeun me pidió explicarte por qué los tenemos aquí.

Hubo un corto silencio, hasta que lo terminé.

– Bueno, soy yo quién se habrá metido en problemas en el pasado– Miré a mi hijo, estaba profundamente dormido– pero mi hijo no hizo nada. Así que llama a algún conocido mío y déjalo libre.

Ahora Seo estaba seguro de sí mismo, dando una imagen de alguien que se respeta.

Querido, con 1,67 no puedo temerte.

– No voy a hacerlo, no hasta que consiga lo que quiere la jefa.– Me miró fijamente.– Quiere a Han Jisung.

¿Jisung? ¿Al chico que besé el día de ayer sin su permiso? ¿Al chico que robó un cuarto de mi corazón? ¿El rapero de un grupo?

– ¿Por qué me buscas a mí? Él está en 3racha contigo, búscalo si deseas.

– Porque no lo queremos exactamente a él, queremos sacarle información.– Subió la voz.

– ¿Información de quién?

– No hagas preguntas, yo las hago.

– No hagas preguntas, yo las hago.– Repetí con un tono burlón.

– ¡Lee Minho!– Golpeó la mesa en donde estaba sentado y se paró.

– ¡Lee Minho!– Intenté pararme pero olvidé la cadena en mi cuello.– Mierda.

– Bien, queremos información de su amigo.

– ¿Y por eso me secuestraste a mí y a mi hijo? ¿Por eso tuvo que ver la peor parte de su madre?– Hice énfasis en la última palabra.

– Lamentamos eso, no sabíamos qué otra opción tomar.

– Podrían haber ido a su casa, seguirlo y secuestrarlo en la calle, o incluso seguirlo hasta que llegue a la casa de ese sujeto al que tanto buscan.– Me paré con cuidado y me acerqué lo más que pude.

– Qué inteligente, deberías trabajar para nosotros.– Se acercó a mí.

– Ni lo creas.

– Bien, te soltaré cuando llames a Han Jisung.– Me entregó un teléfono, el cuál no sabía si tomarlo o no.

– ¿No le harán daño?– Pregunté, tomé inseguro el móvil, como si supiera su número de memoria.

– No, a menos que no quiera darnos la información.

No quería que le hagan daño.

Apreté unos números al azar y alguien contestó.

– ¿Hola?– Dije a través de la línea.

Hola, ¿quién eres?– Una suave voz me contestó sin problema.

– Me llamo...– No sabía si decirle mi nombre real o no.–... Donghyuck. ¿Con quién hablo?

Con Yang Jeongin.

Changbin me quitó rápidamente el celular de las manos y habló con desesperación.

– Mira, bastardo, soy un integrante de la mafia amarilla, y juro que si no vienes mato a tu amigo.

Haz lo que desees, nunca podrían atrapar a la mafia roja.– Y cortó.

El chico parado enfrente mío tecleó otros números y se acercó el móvil a la oreja.

– Busca a Han Jisung, ¡urgente!


~

Volviiiii, sé que no me extrañaron pero bueno.

Lamento muchísimo haberme desaparecido.

He estado ocupada y ¡ahora terminé las clases!

Tendré más tiempo para escribir y demás, a menos que no tenga imaginación :(

Espero que disfruten este capítulo

Creo que es más largo de lo habitual :s

Just For You [Minsung]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora