• Capítulo III •

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-Zarina vete a dormir en este instante!
-Mami, no quiero, ese muchacho me da miedo
-¿Cuál muchacho?
- El que me mira mientras duermo
-¿Te mira?
- Si! Junto a mi ventana
- ¿Hablas de un pervertido?
- No! Sino que simplemente me mira y me aterra, además su energía es pesada
- Bueno ya Zarina! No me gusta que inventes esas historias para preocuparme y llevarte a dormir conmigo. Ya estás grande
-Pero...
-Sin peros, te vas a dormir ahora!!!!

Entré en mi habitación, por lo general siempre dejaba mi lámpara encendida, odiaba la oscuridad.
Me aseguré de que mi ventana estuviera bien cerrada y me dispuse a destender mi cama para acostarme.
Tomé a mi oso de peluche y me hundí entre las sábanas y al fin me quedé dormida.
Estaba a la mitad de un sueño profundo y depronto oí  que alguien golpeaba el cristal de la ventana y comenzé a sentir esa energía pesada que lograba hacer que mi respiración se acelerara , abrí mis ojos con un poco de dificultad y de nuevo lo vi ahí , acurrucado mirándome mientras golpeaba con más fuerza, llegué a pensar que alguien lo escucharía o que incluso rompería el vidrio.
Mi única salida era darle la espalda y fingir que seguía dormida, aunque por dentro temblaba, sólo deseaba en ese momento que amaneciera pronto para que se fuera de una buena vez...

-Zarina, Zarina! Oye! Tierra llamando a Zarina
- ¿Ah?- reaccioné al ver a Laura agitando su mano frente a mi rostro
- Estás muy distraída hoy, ¿Te pasa algo?
- No, tranquila, no es nada, es solo que anoche no dormí muy bien
- ¿Es eso? O el golpe no te deja pensar-dijo sarcásticamente
- Tonta - dije riendo
- ¿De veras rodaste por las escaleras?
- si, ya sabes que soy algo torpe

Le había dicho a Laura que había tropezado con el tapete del pasillo y que había rodado escaleras abajo hasta llegar a la sala y por eso tenía la frente cortada, no quería decirle que un chico que me perseguía desde los 7 años y que se suponía que había desaparecido, regresó casi 9 años después a atormentarme y golpearme contra una pared, sería la excusa más estúpida que podía decirle por no haber ido a la fiesta
- Mmmm... Ya veo ¿Estás segura? Si necesitas ayuda para lo que sea ya sabes que cuentas conmigo

Debía decirle la verdad, era la única persona en la que podía confiar,¿Sería lo correcto?, se supone que es mi amiga ¿verdad? además estaba igual de loca que yo,así que no creo que mi historia le sonara extraña

- En realidad, en este momento necesito tu ayuda como nunca
- ¿De qué se trata?
- Necesito que me ayudes a deshacerme de mi peor pesadilla.

†JUNTO A MI VENTANA†Donde viven las historias. Descúbrelo ahora