Miles de dudas

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Karol Sevilla

—Has escuchado fuera de contexto —Digo y finjo una sonrisa, trato de entrar al aula pero me ataja.

—Ámbar, tenemos que entrar, la profe se va a enojar con nosotras —Dice Carolina hablando de mí y ella.

—Me importa muy poco, acabo de escuchar que está embarazada, vamos, digan la verdad —Se pone de brazos cruzados en la puerta.

—¡Señoritas, entren por favor —La profesora grita desde su escritorio.

—Salvadas por la campana —La rubia se corre de la puerta.

—Enrealidad por la prof... —La interrumpo a Carolina con un codazo.

—Shh, vamos —Entramos al salón rápido y nos sentamos.

—No hubieses hablado tan fuerte —La culpo.

—¿Es mi culpa? Ella es la chusma escuchando atrás de las paredes —Dice susurrando.

En realidad si, Ámbar estaba en nuestro salón pero ella va un año más, con Ruggero, pero por alguna razón entró aquí, y cuando estábamos hablando cerca de la puerta ella se apareció y escuchó lo que dijimos.

—Ya, okey. Debemos encontrar una mentira para salvarnos de esta.

—Karol y Carolina, me hacen el favor de guardar silencio o salen de mi clase —La profesora nos regaña.

—Lo siento —Digo y sonrío, la profesora se da vuelta y empieza a escribir en el pizarrón.

[...]

—¡Corre! —Le digo a Carolina mientras tratamos de escondernos de Ámbar, no quiero que me encuentre, no quiero dar explicaciones.

—¡No ves que tengo estos zapatos incómodos! ¡Me puedo doblar el pie! —grita y yo río, no sé si son los nervios o que pero tengo muchas ganas de reír.

—Ey, ¿que pasa? —Agustín nos encuentra.

¡Justo ahora! ¿ES ENSERIO?

—Nada -sonrío disimulando.

—Ambar se enteró que Karol está embarazada y no queremos cruzarla —le explica sin problemas.

Que gran amiga tengo.

—No les estaría funcionando, allí viene —Agustín señala detrás nuestro.

—Nos hubiera funcionado si no te cruzabas —le digo y ruedo los ojos.

—¡Esperen! —Ambar nos grita, Carolina me toma del brazo para seguir corriendo pero ho niego, no voy a seguir huyendo, los problemas se enfrentan, igual tarde o temprano todos van a saber.

—¿Qué quieres? —le pregunto.

—Hablar.

—Pues habla, anda.

—A solas.

Miro a Carolina y Agustín y ellos entienden y se van, solo espero que no muy lejos, quién sabe si necesite ayuda.

Nos movemos un poco a un lugar menos "transitado por alumnos" así hablamos tranquilas, espero.

—Ahora sí, habla —le digo desafiante.

—¿Cómo es eso de que estás embarazada? —Me pregunta y se cruza de brazos.

—¿Quién dijo eso? —le pregunto como si de verdad no supiera nada y estuviera desconcertada.

—¡No te hagas! Escuché que nadie se iba a dar cuenta de que estás embarazada, deja de negarlo.

—¿Para qué quieres saberlo? Además Carolina me dijo "nadie se va a dar cuenta de que estás embarazada" porque solo jugaba ya que me duele la panza y ella siempre me carga con eso, cosas de amigas —lo digo lo más natural posible pero ella no parece creerme y entre cierra los ojos.

Somos Padres (Ruggarol) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora