El poder del samurai de la oscuridad

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Era una tarde tranquila en el palacio de Jade, el aire de la montaña estaba moviendo todo, en el caso de Himiko, ella estaba sentada meditando cuando sintió un aroma de el aire que la hizo sonreír.

¿Pudiste escaparte de mi hermana? -dijo Himiko sonriendo, Isaac estaba suspirando, el estaba caminando hasta que se acercó a Himiko y se sentó a su lado-

Lo lamento, era más rápida de lo que recordaba -dijo Isaac calmado- aunque me es difícil fingir que no pasa entre nosotros

Si también es difícil para mi fingir que no pasa nada -dijo Himiko calmada- deberíamos ir a un lugar donde nadie nos moleste, tener una cita a solas y lejos

Me suena bien -dijo Isaac sonriendo, Himiko lidió y pegó su cabeza con el mentón de Isaac soltando un leve ronroneo-

Tranquilo puede que no dure mucho esto de escondernos -dijo Himiko sonriendo- alguien viene -levantó las orejas calmada y se alejó de Isaac dejándolo un poco molesto, Himiko solo se dio la vuelta viendo que Tigresa estaba cargando a Yu en sus brazos- hola mamá

Hola hija ¿podrías llevar a tu hermano a su cuarto? Necesito descansar un poco y entrenar -dijo Tigresa sonriendo-

Claro mama -dijo Himiko sonriendo, cargó a Yu y se lo llevó con ella-

Bien Isaac ya estamos solos -dijo Tigresa sonriendo y se cruzó de brazos acercándose a Isaac- ya es hora de que me demuestres tus habilidades, han pasado más de tres años quiero ver que ten fuerte te has vuelto

Yo también quiero demostrarle mi fuerza -dijo Isaac sonriendo, los dos se acercaron al centro del patio y se inclinaron con respeto al otro, ambos se quedaron en la misma postura del estilo del tigre-

Espero que tu padre supiera como entrenarte porque esta vez no tendré piedad -dijo Tigresa sonriendo-

No esperaba menos de usted -dijo Isaac sonriendo, los dos avanzaron y saltaron gritando, Tigresa lanzó un golpe en forma diagonal pero Isaac levantó el brazo izquierdo bloqueando el golpe, los dos cayeron al suelo y giraron lanzando una patada chocando sus piernas, los dos forcejearon un poco pero saltaron para alejarse, Tigresa lanzó un golpe disparando una bola de fuego, Isaac solo levantó la mano derecha creando un muro de hielo, la esfera lo golpeó causando una ligera explosión de vapor, Isaac apareció detrás de Tigresa y lanzó una patada pero Tigresa se agachó esquivando el ataque, se giró en el suelo dándole una patada a Isaac en sus piernas, Isaac estaba por caer pero giró en el aire y cayó sobre sus manos, Tigresa quedó sorprendida y más cuando Isaac la sujetó de su mano con la cola y comenzó a girar para lánzala contra una pared, Tigresa se quejó pero Isaac la soltó y la sujetó en sus brazos-

Maestra lo siento creo que pase -dijo Isaac preocupado-

No, esta bien hay -dijo Tigresa un poco adolorida, se levantó y se sujetó la cabeza- debo reconocer que te has hecho fuerte al pasar los años

Si lo lamento -dijo Isaac preocupado, ayudó a Tigresa a ponerse de pie- ¿no la lastime?

Claro que no, tranquilo puede que esté un poco vieja pero aún tengo mi fuerza -dijo Tigresa sonriendo- jamás espere que usaras tu cola como extremidad para pelear

Si, mi padre dijo que ere una extendió más de mi cuerpo para poder pelear -dijo Isaac calmado-

Ya veo, es buena idea, bien sigamos Isaac quiero comprobar El Progreso de mi alumnos -dijo Tigresa sonriendo, quedando en guardia-

Bien aquí voy -dijo Isaac sonriendo y también se quedó en guardia, los dos gritaron y avanzaron corriendo, el palacio se llenó de sonidos de golpes, impactos y explosiones, Po estaba sonriendo viendo cómo una bola de fuego salió del palacio-

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