Kung fu Elemental

Hanabi se convierte en Guardiana

La noche pasó y a la mañana siguiente Bruce estaba sentado en una mesa con ojeras y parecía cansado, tenía una taza de té en las manos mientras Izanamy y Hinata estaban comiendo frente a él-

Oye Bruce ¿estás bien? Parece que no dormiste -dijo Izanamy calmado-

Es verdad te ves muy cansado, nosotros por otro lado dormimos muy bien juntos -dijo Hinata sonriendo-

¿Dormir juntos? -dijo Bruce sorprendido y apretó la taza hasta que la rompió en pedazos y golpeó su cara en la mesa-

Y ahora ¿que te pasa? -dijo Izanamy confundido-

Es verdad, has estado actuando raro esta mañana -dijo Hinata intranquila-

Ah bueno...yo...ah la verdad es que tengo un poco...de resaca...jaja -dijo Bruce riendo de forma nerviosa- oigan miren eso -señalo al frente y los dos giraron para ver como un hipopótamo estaba sentado con el pantalón a medio bajar mostrando la raya-

Oye ¿y mi café? -dijo molesto a una oveja que al parecer era la mesera- ya llevo media hora esperando, eres una mesera no eres otra cosa y date prisa -la oveja asintió nerviosa y se retiro corriendo-

Estupido gordo -dijo Hinata molesta- hey ¿cuanto a que le puedo meter una galleta en la raya?

No creo que puedes esta muy lejos -dijo Bruce sonriendo-

Ella puede, venga tu si puedes -dijo Izanamy sonriendo, Hinata tomo una galleta y apunto al hipopótamo, solo la lanzó con fuerza y la galleta quedó dentro del pantalón, Hinata, Bruce e Izanamy se estaban riendo tratando de no hacer ruido-

¡¿Quien fue el wey?! -el hipopótamo se giró mostrando que usaba lentes oscuros y un bastón para caminar, al parecer era ciego-

Hay en la madre -dijo Bruce sorprendido-

Aah...ups -dijo Hinata sonriendo nerviosa-

Los juro que los voy a matar -dijo el hipopótamo molesto-

Ah señor perdón me disculpo por mi hija de cinco años que estaba jugando -dijo Izanamy calmado haciendo su voz más gruesa, solo vio a Hinata la cual se reía- niña mala sabes que no debes jugar con tu comida, ahora pídele disculpas al señor

Hay perdón señor le cayó la galleta en las pompis -dijo Hinata sonriendo pero usaba una voz aguda para hablar-

Bueno viendo las circunstancias está bien lo paso -dijo el hipopótamo tranquilo, los tres solo se taparon la boca para reír en silencio, después de un rato los tres estaban caminando por la calle más relajados-

Jajaja a tu esposa si que nos sabe meter en problemas Izanamy -dijo Bruce riendo- así se hace Hinata

Bien ir a ver a los chicos -dijo Hinata sonriendo, Bruce sonrió un poco y abrió los ojos-

¡No! -Bruce grito nervioso y los dos lo vieron confundidos- es decir...no yo voy a verlos, ustedes deben pedir que armen los campamentos y que pongan los tambores y que las doncellas sepan como tocar las tonadas de guerra y yo voy a ver a los chicos -Bruce se fue corriendo muy rápido mientras Hinata e Izanamy se vieron confundidos y luego vieron a Bruce corriendo hacia el hotel- logré perderlos un poco pero espero que los chicos estén listos -pensó nervioso, mientras tanto en el cuarto Hanabi estaba abrazada de Darién con la sábana aún encima nada más-

Vaya esa fue una noche maravillosa -dijo Hanabi sonriendo-

Si también lo fue para mi -dijo Darien sonriendo, los dos se estaban por dar un beso cuando la puerta se abrió de golpes-

¡Hey hacedores de bebés! -Bruce entró gritando y los dos jóvenes gritaron alejándose de un salto, Darién saltó a la cabeza de la cama mientras Hanabi se levantó y se cubrió con la sábana, los dos estaban nerviosos moviendo sus colas-