Capítulo 9: Estoy enamorada de él.

86 5 0
                                    

En cuanto terminé el ensayo fui a buscarlo. Salí del salón y estaba bajando de las escaleras pero escuché que me habían nombrado, así que con pasos lentos iba escuchando la conversación.

–Lo siento amor, te prometo que le sacaré jugo de esa zorra. —¿que?— si amor perdóname por salir con esta, quería agarrarle confianza. Recuerda que planeamos este plan y está resultando, esa perra etá en mis pies. —Oh no, no lo dijo— no te preocupes, pronto quitaré su plata. Por cierto, hace rato me hizo una canción, que patética ¿cierto amor? —Basta, quería ser gentil con mi plan pero creo que no resultará. Escuché sus pasos y me quedé en mi posición.— Ah, Alejandra —se mira nervioso— ¿qué haces aquí?

–Pues te vine a buscar pero creo que tú "amor" no me gustaría estar con ESTA —me apunté— perra y zorra. —Me volteo y me dirijo nuevamente al salón.

–Hey, todo lo que escuchaste está mal, solo la complací.

–Solo eres un idiota más Mario.

–¿Lo crees? —se va caminando lento hacia la puerta y lo cierra.— Bueno —sonríe y se acerca.— No puedo creer que pienses eso de mi —se ofende— éramos amigos ¿te acuerdas de eso?

–Como lo dijiste ÉRAMOS amigos, así que compa —en este punto estaba muy cercas de mi, coloque mi mano en su hombro— déjate de chingaderas y lárgate de mi vista.

–¿Y si no quiero mi lady? —me agarra y empieza a besarme bruscamente, se mete sus manos heladas debajo de mi uniforme— ¿no te gusta? —susurra y me pega a la pared, comienza a besar mi cuello. Ahí no señorito. El siguiente movimiento que realizo es pegarle un rodillazo en su parte intima, después le doy un putazo en su mejilla. —Ay ¿Porqué tan agresiva mi lady? —sonríe como psicopata.

–Estás loco idiota ¿crees que después de todo estaré de fácil contigo? Ni madres, recibirás mis vergazos contigo.

–No sin antes yo hacerlo primero.

Llega hacia mi y me golpea en el abdomen, obviamente sentía dolor pero más que dolor. Era enojo, así que dejando de ser gentil, le agarro de su cuello y golpeo mi cabeza con su cabeza. Se retrocede, le pego en sus rodillas y cae. Esto no sé si estará a mi favor o en contra pero cuando me hacen enojar, sale mi lado agresivo sin medidas, ejemplo claro de ello fue con el baile de bienvenida.

–Esto Mario —golpeo con mi puño a su mejilla— y esto —le pego en la otra— por utilizarme y esta —me levanto y pateo en su parte íntima— por idiota y ingenuo que serías ¿crees que caigo con fácil? Ni que fuera ella. —Golpeo en su estómago, y si tan solo me hubiera traigo mi navaja, ya estaría hombre muero. Pues ni tan hombre por golpearme.— Espero que de esto te deje claro que no te metas conmigo. Ahora espero nunca pero enserio NUNCA tendré que volverte a ver. Hijo de puta —escupí.

Salgo del salón con mi mochila y voy directo al baño. Tengo que sanarme o ver qué es notorio para cubrirme y evitar el cuestionario de mi madre.

[...]

–Claro Melody me encuentro bien, ya no sé ven las herida, chau. —La colgué.

Ella me vió en el baño con las heridas y le dije que iba explicarlo en cuanto llegue a mi casa, por suerte mi madre tuvo un compromiso y evidentemente pude hablar fácilmente con ella.

¿Se preocupó? Si pero le dije que después de todo no paso a peores cosas. Ahora faltaba de contar a Camila, presiento que me dirá lo que hice estuvo mal pero pues el hecho ya está. De hecho, la estoy marcando.

–Hey Camz ¿estas disponible?

–Siempre bebé ¿videochat?

–Simón, yo te marco.

Todo es Posible [S. M. 2] | Wattys2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora