Relatos.

Lilium Box.

El cielo sigue gris, con la ventana cerrada, puedes ver las gotas chocar en el cristal del automóvil. Es un buen día para un funeral o mejor dicho para una despedida.
Hoy es la graduación de duodécimo año, el último día en el cual veré este pueblo de porquería; donde les diré adiós a los sujetos de este sitio, sobre todo a cuatro de ellos. Mi madre conduce mientras observo el aguanieve caer, hubiera preferido un día más despejado pero supongo que es el adecuado a la ocasión que se festejará al llegar a la escuela.

-¿Cariño- el dulce tono de su voz me despierta-, te encuentras bien?- sin quitar la vista de la ventana, la miro de reojo.-Sí mamá, solo callate y conduce. Se nos está haciendo tarde.- su vista jamás se aparta del camino nevado y la mía reposa en el edificio que se ve a lo lejos quien me espera para despedirme en sus adentros a compañeros de clase que me odian y odio a muerte.

Al entrar a clase mi vista siempre es llamada, por el cabello rojo, desde ya hace años cuando la ushaka verde desapareció, dejando a la vista sus rizos rojizos de mi archi-enemigo kyle. La orden era sencilla "Esperen en sus salones correspondientes de la primera hora, antes de ser llamados al jardín de la institución" pero por el clima supongo que tardarán en arreglarlo, es un mal comienzo para un gran día.

-¿Eric? pensé que no vendrías- El pequeño Butters se acerca a mí con su típica sonrisa tonta -. Por supuesto que sí- respondo al verlo enfrente del pupitre-, no me perdería una ocasión tan especial como esta.- sabía que la mayoría pensaba que no vendría por mi último berrinche de el día anterior pero las insistencia de la directiva y la suplicas de mi madre terminaron en venir a recibir el supuesto diploma.- QUE BIEN- resuena su voz en mis tímpanos-, pensé que tendría que ir a tu casa para despedirnos, yo- interrumpo su oración- No es momento para lloriqueos Butters, si piensas decir cursilerías para ello- señaló a los de tras de mí-, tienes a los maricas de haya- refiriéndome a mis "amigos"-. Sabes que no soy de sentimentalismos y más este día donde no los volveré a ver- se que el rubio tiene las mejores intenciones de despedirse pero no me gustan las despedidas, es mejor así-. Yo, igual te voy a extrañar.- dijo y se alejó de mí. Para luego despedirse de los demás del aula; al cabo de unos minutos el director avisa por los parlantes, dando a entender que era hora.

-HEY TU- la voz tan familiar detrás de mí al salir del aula me detuvo -GORDO- mas con ese apodo- ¿QUE MIERDA QUIERES POBRE?- Kenny mi mejor amigo de niño, ya que hace años nos distanciamos y solo nos reunimos en pocas ocasiones -JAJAJAJAJA ¿Que, no te despides?

-Sabes que me parece muy marica.

-Ya, ya, pensé que me dirias "Hijo de puta me despediré en la fiesta en la casa del Nigga" jejeje irás ¿verdad?

-No lo sé, me parece muy cliché y aburrido.

-Oh vamos, será la última vez que estaremos en este pueblo de mierda, la ultima vez que los cuatro estaremos juntos- hice caso omiso a sus habladurías y seguí caminando por el pasillo al jardín principal-, Cartman ¿Enserio, me dirás que no quieres hacer algo con lo cual nunca te olviden?¿No quieres ser recordado por todos a los que odias?- por fin miro al chico rubio a mi lado sin detener la caminata- Con que tienes un plan- veo una sonrisa fluir en sus labios- QUE HIJO DE PUTA ¿Que piensas hacer?- saliendo al jardín tomamos asiento juntos para oír la ceremonia- Ese es el problema Cartman, no tengo una mente tan desquiciada como la tuya.

-Ja, no se si tomarlo como halago o como insulto.

-Tomalo como quieras, solo has un plan para ummm hacer la fiesta más entretenida.

-Jajaja cuenta conmigo, esa fiesta será lo máximo.

La ceremonia transcurrió normalmente pero lo que todos esperaban eran la fiesta para ponerse briagos y coger a su novia o novio que prometieron seguir viendo por Skyte JA que idiotas.