La Confusión

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Y mi mente se colapsó, no podía pensar en otra cosa más que en Él. Mi cerebro, mis músculos, mis articulaciones, mi mente,  todo estaba en Shock, No realicé ningún movimiento y me quedé allí por algunos minutos, después, reaccione, encendí el auto y me dirigí al otro lado de la carretera, estacione el auto, lo apagué y me baje de el, Quería seguir el mismo camino que aquel extraño. Así que me dirigí hacia aquel bosque tenebroso, estaba oscureciendo pero no me importó en lo más mínimo, quería verlo, sentirlo, saber sobre Él. Yo quería respuestas, quería saber realmente quien era y que estaba haciendo. Pero no quería perder su rastro, realmente lo necesitaba así que fuí caminando y poco a poco Me fui adentrando al bosque. Hacia mucho frío, mi cuerpo estaba temblando, podía escuchar ruidos como el Sonido de las ramas al caer, el sonido de mis pisadas, y de algunos animales como búhos, grillos y Lobos aullando. Sentía  tanto miedo, me sentía sola, más sola que nunca y muy vulnerable, pero en ese momento mi más grande sentir era incertidumbre y nada más me importó. Me dirigí hacia el centro del bosque, estaba caminando, hacia tanto frío, observaba a través de las ramas de los árboles la luz de la luna y rogaba a dios poder ver a ese extraño otra vez, me adentraba mas y más dentro del bosque, tratando de verlo otra vez pero nunca lo encontré. Juro que insistí en encontrarlo, me pase horas buscándolo pero nunca apareció. El tiempo se me fue volando, no tenía idea qué hora era pero al juzgar de la Luz de la luna ya pasaban de las 22: 00 pm.

-Es momento de regresar. Me dije a mi misma, pero en ese momento escuché ramas que se rompían por qué alguien había caminado sobre ellas. Así que trate de seguir ese ruido, me dirigí al lado contrario del bosque y me adentré más y más, Fue así que al llegar frente a un lago, sobre las ramas de los árboles caídas en el suelo había mucha sangre. Era un lobo, Estaba acostado, así que me acerqué a él para saber que le había sucedido y para saber si seguía vivo o no, así me hinqué frente el animal y coloqué mis dedo índice sobre su cuello. Lamentablemente estaba muerto. pero toda la sangre que escurría sobre su cuello estaba fresca.
-El animal que lo atacó no debió ir muy lejos. Pensé.
Así que me regrese a la parte del bosque donde estaba. Escuche o través las pisadas y de pronto allí estaba, sentí esa mirada otra vez, Finalmente estaba allí, esta vez estaba segura que lo vería. Mire a todos lados pero al voltear al lado izquierdo, al lado de un arbusto de cerezas había un gran lobo negro, me estaba gruñendo, realmente Lucía muy enojado. Me causo terror, Camine hacia atrás y tropecé con las ramas secas. El lobo se me abalanzó, mi corazón latía muy fuerte. Solo cubrí mi rostro con mis manos y cerré los ojos esperando lo peor... Pero de pronto escuché un gran golpe y el chillido del lobo. al retirar mis manos de mi rostro el lobo estaba acostado, herido y chillando, y justo al lado de el estaba ese chico con la túnica negra. El lobo se levantó y se fue cojeando con mucho dolor mientras gotas caían de su abdomen.
Mi visión estaba completamente borrosa, no sabia porque o como había hecho eso, traté de levantarme pero estaba muy débil. Todo estaba Tan oscuro, no podía ver con claridad.
-Oye, Por favor... Ven, ven, Quiero... Te necesito.
Le dije
Entonces el se levantó, volteó su mirada a mi y me miró. Pero de pronto mis ojos se nublaron. No pude resistir más, así que me desmayé...

IMPULSO ESCARLATADonde viven las historias. Descúbrelo ahora