𝐃𝐎𝐒 𝐌𝐔𝐍𝐃𝐎𝐒 《𝓔𝓻𝓲𝓬𝓴 𝓑𝓻𝓲𝓪𝓷 𝓒𝓸𝓵𝓸𝓷》

10.

AMERICA

Hoy era el último día de los chicos en Chile y debo admitir que eso me afligía demasiado, pero sabíamos que algún día llegaría y si se preguntan por Erick, nada más pasó entre ambos, el me aclaró que todo fue una confusión y pues, lo entendí.

En estos momentos me encontraba esperando a los chicos, Zab, Chris, Rich y Erick ya que iríamos a un camping por el día.

-¡Que pasa vecina! -se bajó de la van un sonriente Richard en dirección a saludarme.

-Que pasa rubio -lo abracé fuerte.

Saludé a los demás chicos con la misma emoción y luego partimos a nuestro destino. Joel y Cam no nos acompañarían ya que ambos querían disfrutar sus últimas horas juntos.

[...]

-¿Que hay en un camping? -preguntaba Chris mientras nos adentrabamos en el bosque.

-Pues hay osos y lobos salvajes que vendrán a atacarte -le dije.

-¿Ah si? -dijo Vélez con un tono de voz dudoso.

-Chris sólo camina -lo empujó el ojiverde.

Luego de caminar unos minutos encontramos un lugar perfecto donde nos quedaríamos durante el día.

-¿Que haremos primero? -pregunté.

-Pues comer, llevo al menos 2 horas sin probar un bocado y me estoy poniendo de mal humor - Asi es. Christopher Vélez.

-¿Que trajeron para preparar?

-Pasamos a una tienda y compramos galletas, chocolates, unas cuantas energéticas, bebidas, dulces y mas galletas.

-Chicos, ¿No compraron nada de comida? -pregunta un asustado Christopher.

-Al ser la única mujer y creo que la más inteligente, traje unos emparedados, marshmellows, unas bolsas con papas fritas y unas cuantas cosas más.

-¡Sin Mer que haríamos! -salió Zabdiel.

Nos ubicamos en las mesas que estaban allí y nos pusimos a comer los emparedados que mi madre nos había hecho.

-¿Y a dónde viajan ahora? -pregunté.

-Mañana nos toca Montevideo si no me equivoco -me contesta Erick.

-No puedo creer que ya nos tengamos que ir, sinceramente pensé que esto iba a ser más difícil -dijo el morenazo de Richard.

-¿Que sería dificil?

-Venir a Chile, siempre nuestras visitas son caóticas. Las chicas conglomeradas en las entradas y practicamente se enteran de dónde estemos asi que no podemos recorrer nada -me respondió.

-Es verdad, amamos a las Chilenas pero si que son locas -agregó Chris.

-¿Y les ha gustado Chile?

-Mi amor esto parece una entrevista de esas que nos hacen para la televisión -reímos todos.

-Lo siento, sólo quiero saber cómo se han sentido aquí.

-Pues tú has hecho que todo sea más cómodo y mucho más divertido -habló porfin el ojiverde.

-Todo es gracias a mi ausente amiga, si ella no me hubiera llevado a rastras a su concierto, no estaríamos aquí.

Seguimos hablando de su estadía hasta que el sol comenzó a sofocarnos por lo que decidimos entrar a una laguna que nos quedaba muy cerca.

Yo me saqué mi ropa, quedando solo con un traje de baño de dos piezas color rojo y sin pensarlo 2 veces me lancé al agua de un chapuzón salpicando a los chicos.