Capitulo 2: Happy Hour

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No lo puedo creer cuando lo veo, tan alto, pelo negro y unos ojos verdes impresionantes, su voz me saca de mis pensamientos:

     -pero si es tu, mi distracción-

dice en voz alta y riendo

        -perdón, se conocen-

Clara nos mira seria:

          -Lo que pasa madre es que esta señorita casi la atropello, hoy acá afuera- me mira con una leve sonrisa – lo siento rose, pero te vi con ese pelo tan lindo al sol que me distraje-

lo miro con la boca abierta y lo único que digo

         - No pasa nada, solo un mal conductor maneja y habla por celular-

lo ataco para que dejara de mirarme con cara de niño bueno, dejo de sonreír al instante, Clara me mira:

               - ¡ROSE!, no digas eso de Bru, el tiene años de experiencia manejando-

me dice:

          - lo dudo, si fuera tan bueno no se distrae con nada- Clara va a protestar y la interrumpo – algo mas clara debo seguir con mi trabajo-

lo digo enojada

Bruno me mira enojado 

         - ella es la mujer con la cual debo trabajar acaso, porque si es así, no pienso hacerlo-

contesta

Que se cree este imbecil, viene a menospreciar mi trabajo, acaso se cree superior a mi, pienso, miro a clara para ver si dice algo

         - Rose, ve a trabajar, necesito hablar con Bruno un momento a solas-

Salgo de la oficina sin mirar a ninguno de los dos, al cerrar la puerta se escuchan los gritos de Clara y Bruno.

 Me dirijo a mi despacho, me siento y doy un gran suspiro, me pongo a revisar nuevamente mi línea cuando llega Andrés:

-         que paso allá adentro-

Lo miro y solo niego con la cabeza

-         mejor no preguntes, ya deseo que sean las seis he irnos por una copa-

Me mira con el ceño fruncido y dice

-         vi a Bruno aparecer en la oficina, ¿acaso es él tu nuevo compañero?-

-         así parece, pero por lo visto él no quiere-

Le digo haciendo un puchero y riendo a la vez, se ríe conmigo, da media vuelta y se va.

   No se nada de Bruno o Clara durante un buen rato, ya no se escucha ni un grito ni nada, así que logro concentrarme en mi línea, me suena el citófono, contesto:

-         Rose, ven a mi despacho-

 Y cuelga, porque esta mujer debe de ser así, camino hacia su despacho, golpeo, pero esta vez entro sin esperar a que responda

Mi pequeña DistraccionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora