Capitulo 28: confesión

223 11 8
                                    

Llego el domingo y después de un sábado desagradable, me levanto veo a bruno en la cama durmiendo profundo, pobre estuvo consolándome casi toda la noche, hasta que me dormí, me dirijo al baño, veo mi rostro y estoy horrible, unas ojeras tremendas por tanto llorar, maldita Eloisa, siempre jodiendome la vida, pero ahora es peor, como quisiera que desapareciera junto a Felipe, pero como no soy maga no puedo hacerlos desaparecer, me río de solo pensarlo, cierro mis ojos y suspiro frente al espejo, siento unos brazos alrededor de mi cintura y unos besos en mi hombro, al abrirlos veo a bruno mirándome

      -hola corazón, estas mejor ya-

Me pregunta                                                                         

     -si, pero me veo fatal-

Le respondo haciendo un puchero

    -no, para mi estas hermosa así- me dice, me ruborizo con sus palabras –anda, vamos a desayunar que hoy iremos donde tu padre-

Me dice otra vez y me da un azote en el trasero

    -¡¡OYE!!-

Le grito y veo que sale corriendo hacia la cocina, al salir tras él, me resbalo y caigo de bruces en el suelo dándome en la cara

     -¡¡ROSE!!-

Grita bruno, acercándose a mí

      -estoy bien, no te preocupes-

Le digo

     -no, estas sangrando, te rompiste un ceja-

Me dice, cuando me ayuda a pararme

     -con razón me duele-

Le respondo

     -vamos, tenemos que ir a la clínica-

Me dice, nos bañamos rápidamente y nos vamos, después de una hora y media, salimos de la clínica, yo con puntos, tres en total, el doctor dijo que en semana y media me sacaría los puntos y apenas se notarían.

     Vamos en camino a la casa de mi padre, cuando me vea pegara el grito en el cielo, al llegar a su casa nos recibe Katina

      -hola muñeca, pero que os paso-

Me pregunta

     -me caí por salir corriendo-

Le cuento

    -uf..., que mal, pero porque estabas corriendo –

Me pregunta otra vez

    -porque le he dado un azote en el trasero y por perseguirme a mí se a resbalado y se pego-

Le cuenta bruno

     -mmm, típicos los azotes cariño-

Nos dice riendo, entramos y al verme mi padre con Pablo, corren a preguntar que me  ha pasado, les cuento lo que paso sin mayor detalle, nos vamos al patio donde mi padre ha hecho un asado, me escuso para ir al baño y al salir de el, mi hermano me espera

Mi pequeña DistraccionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora