-Prólogo-

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- Recuerda llamar todos los días – abraza fuerte mi cuerpo, con mucha angustia – y si tienes algún problema, me llamas, no sé la diferencia horaria Charlie – mira a mi padre esperando respuesta.

- No lo sé Michi – siempre me resultó tierno el apodo de mi mamá – estuve investigando eso ayer.

- Solo me iré a Los Ángeles, no a otro planeta – reí, debo admitir que mis lágrimas quieren salir devuelta, pero ya estoy acostumbrada a reprimirlas. Con el paso del tiempo se volvió una tarea fácil.

Di el último abrazo, rogando un poco que el sentimiento de soledad sea más pasajero que lo que ya me imagino. Me estoy yendo sola. Sola a otro país.

Megan me ofreció trabajar con ella, jamás imaginé que una simple estilista de clase media como yo iba a llamar su atención. Siempre me gustó destacar en mi trabajo, y las personas a mi alrededor me decian "Fran eres increíble". Yo no lo diría así, digamos que no soy muy "yo me amo", mi autoestima podría estar en un -100 ¿Tal vez?

"Francesca, cuando aterrices en el aeropuerto de LA, ve directo a la salida, te estaré esperando junto con el taxi, estoy muy emocionada por esto, te quiero!"

Admito que los mensajes de Megan me hacen sentir un poco más en casa ¿Qué hubiese pasado si no hubiese ido  a su workshop el año anterior? Definitivamente hoy no estaría yendo a Los Angeles a ser su mano derecha. Su confianza hacia mi trabajo me emociona y me intimida a la vez, espero no defraudarla, ella es estilista de artistas importantes, yo simplemente tuve la suerte de poder pagar su clase y que ella "amara todo de mi" Después de esa semana nos hicimos muy amigas. Ella se quedó un par de meses más en Argentina, terminó sus clases y volvió a EE.UU a su hogar, mi nuevo hogar.



Mientras espero que mi vuelo salga, no puedo evitar analizar todo lo que ha pasado en poco tiempo. Renuncié a mi trabajo de moza, para venir como estilista de una banda internacional, deje mi familia y amigos en Argentina, dejé mis costumbres, mi idioma,  mi vida prácticamente para formar una nueva. Sentía en mi la necesidad de agredecer que por fin algo así me pasara a mi, siempre conté hasta la última moneda para llegar a fin de mes, y con esto puedo llegar  más lejos de lo que imagino. Creo que ya me estoy divagando mucho con mis pensamientos.

Las horas se hicieron eternas, pero ya mi ser estaba en suelo estadounidense. Mis manos y mis pies hacen una fuerza sobrehumana para mantenerse quietos, tiemblo como una idiota ¡Maldita ansiedad!

- ¡Oh por dios Fran! – escucho una voz familiar y de verdad siento que vuelve el alma a mi cuerpo, aunque la escucho en inglés.

- ¡Megan! – corro hacia ella dejando mis maletas detrás, necesitaba un abrazo después de tanto tiempo sola - ¿Cómo te encuentras? – siento un bulto duro cuando la abracé, por lo que necesite separarme de ella y mirar su vientre – Oh por dios ¡Megan! – dije con mi lengua natal.

- Primero -ella seguia hablando inglés – apartir de ahora TODO será en inglés, necesito que te acostumbres porque nuestros clientes no saben Español – bufé, era obvio que no lo hacían, agradezco mucho mi nivel avanzado en este momento – Segundo, sí, me embaracé, por eso hay mucho de que hablar, ven vamos al taxi.

Todo parecia un sueño. Estaba por primera vez en los estados unidos, lista para trabajar de lo que amo, y posiblemente perfeccionarme más, basta Francesca ¡Deja de temblar!

- Vaya si qué estás nerviosa – río Megan dulcemente mientras acariciaba su panza con su mano, con la otra tomó la mía – verás que haz tomado la decisión correcta, no te arrepentirás nunca de haber trabajado aquí – tomo con fuerza mi mano – Eres joven Fran, y tienes mucho talento – la miré dudosa – Oh no, no me mires así ¡Sabes de tu talento y predisposición! Por eso te llame a ti.

Love sucks  - cth (terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora