VIGILANDOLES (Gemeliers)

Así no se podía solucionar

Entramos todas a la habitación. Sabíamos que Jesús lo había oido todo. Ya todos eramos conscientes de la situación.

Después de abrazar a Jesús, fui a avisar a sus padres y a sus tíos mientras Dani avisaba a un médico.

-Chicos, ya se ha despertado-anuncié.

-Ay mi niño, menos mal-dijo su madre emocionada mientras se levantaba para ir a verle.

Todos fuimos detrás de ella. Ari no se pudo contener y se lanzó a abrazarme.

Cuando llegamos, todos estaban en la habitación, contando con el médico. Les dijo a los padres de Danisú (se me ha pegado el Danisú JAJA) que tendría que quedarse dos días más en observación.

A nosotras nos dijo que si sabíamos algo de por que estaba así, que lo solucionaramos rapidamente, porque le podía dar otro ataque de ansiedad.

Pero lo que el médico no sabia, era que no es un problema fácil de solucionar.

Después de esto, se fue. Nos quedamos en la habitación todos. Las chicas estaban alrededor de Jesús preocupándose por su estado, mientras yo estaba en el sofá con los padres de los gemelos y los de Ari.

-Entonces ¿os vais cuando Jesús salga del hospital?-oí decir al padre de Ari.

-Supongo. Y luego tendremos que ir a las firmas de discos-continuó Eva- No vamos a estar mucho por aqui.

Al oir eso me quedé petrificada. Así era imposible que todo esto se solucionara. Al ver que ya tenía a las chicas, a Jesús y a dani como amigos, podria ayudar. Sin pasarme, pero podría ayudar.