Capítulo 10

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¡Nuevo opening!

♫ Una botella turuturu turu turu

♫ Una botella turuturuuu Una botella turuturuturuuu Una botella ♫

♫ Botellazo Tururururu Botellazo tutututututrruruuuuu Botellazo tururu Botellazo♫

♫ Milo y Kanon turutururu se van de joda tururu se van de joda turururu y se van de joda♫

A la verga todos tururururu a la verga turururu a la verga tutururururu a la verga♫

Si ves dos Milo y Kanon, por favor, no los violes.

Narrador: En el anterior capítulo de Milo y Kanon XX... Nuestros héroes comenzaron la terrible lucha contra Abel, Atenea y Saga, pero no se esperaron que uno a uno sus compañeros terminaran cayendo en las garras del enemigo. Por fortuna, Ladybug y Oliver, se salvaron del último ataque de Apolo, e inmediatamente contra atacaron a los rufianes después de que Saga traicionara a su mujer, usando así un control remoto que trajo a la historia a los fans de los caballeros, y así vencieron a Abel. Finalmente, la paz había sido restablecida, y a nuestros amigos ahora nada más les queda festejar el triunfo con sus sueldos ya restaurados, y que mejor manera de hacerlo que mal gastarlo en una fiesta, pero no en cualquier lado, sino en la casa de Acuario. ¿Hoy veremos la parte más oscura de nuestros personajes? ¿Seremos testigos de una nueva aventura o será más relleno? ¡Todo esto y más en Milo y Kanon XX hoy!

Se escucha una música bien fachera de fondo.

(Soundtemp – Grassado)

Como nadie se había opuesto a la idea de Milo, todos fueron derechito a la casa de Acuario, y una vez allí, los chicos se encontraron con Camus.

—¡Hey refri con patas! ¿Cómo andas? —le saludó Milo mientras se tomaba un batido de fresa con chocolate.

—Hola Frigorífico —saludó también Kanon.

—¿Cómo andas tío? —levantó la mano Aioria.

—What's up brother? —dijo Mu.

—¿Qué vinieron a pedirme ahora? —entre cerró los ojos Camus mientras estaba cruzado de brazos.

—Tranquilo, hoy no venimos a mangearte, sólo queríamos avisarte que vamos a hacer una fiesta por la recuperación de la economía en Grecia —le avisó Kanon.

—¿Ah sí? ¿Y dónde se hará la fiesta? —preguntó el Acuariano.

—En tu casa amigo, aparte, ahí tenés todos mis chocolates con licor para ponernos bien en pedo —le aseguró Milo.

—¡¿Qué fiesta ni que nada?! ¡Váyanse y no vuelvan! —les gritó Camus.

—Bueno, chicos, ya lo escucharon. Vendremos más tarde con el asado, las papitas y los chisitos —le aseguró Milo.

—¿Pero no acaba de decir que no? —preguntó Mu levantando una ceja.

—¡Hasta Aries tiene mejor oído que tú, Escorpiano del orto! —lo criticó el caballero de la onceava casa.

—¿Qué me quieres hacer el qué? —se puso la mano en la oreja Milo haciéndose el sordo.

—¡Qué te vayas bien a la mierda! —le gritó.

—Ya escucharon, hay que apurarnos —les dijo Milo y abrazó tanto a Kanon como a Aioria.

—Me parece que escuchaste cualquiera —aseguró Mu algo preocupado en lo que se retiraban.

Milo y Kanon XXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora