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El camino vuelta a casa fue silencioso y cómodo. Solo se escuchaba la música de la radio y los segundos en los que Jungwoo cantaba siguiendo la letra de las canciones que sonaban.

El mayor llevaba una mano sobre la rodilla de Jungwoo y el castaño llevaba su mano sobre aquella. Su cabeza iba recostada al asiento y su mirada estaba fija en el perfil de Yukhei.

El ojinegro había notado aquella mirada sobre él, pero no había querido decir nada porque sentía lindo que Jungwoo se concentrara tanto en él.

Jungwoo soltó un suspiro y recordó la conversación que había tenido con Ten hacía unas horas.

Habían estado conversando los cuatro por un largo rato hasta que Taeyong recordó que no habían terminado de llenar los formularios, así que Ten se ofreció a prepararles algún bocadillo y Jungwoo se levantó emocionado para ayudarlo. Sabía que Xuxi odiaba que hiciera todo por él, pero Jungwoo era feliz consintiéndolo con ese tipo de cosas.

Habían estado preparando unos sándwiches conversando casualmente de sus vidas, hasta que Ten dijo algo que sobresaltó a Jungwoo.

"Tae es muy bueno conmigo." dijo el azabache y Jungwoo sonrió al ver la sonrisa genuina en sus labios. "Siempre me ha cuidado mucho de su padre y de todo en general. La primera vez que fuimos íntimos no dejaba de preguntar que si estaba bien—"

"¿Fueron íntimos...?" preguntó Jungwoo con los ojos muy abiertos y miró fijo a Ten.

"Sí, es decir que tuvimos rela—"

"Yo sé lo que significa." dijo Jungwoo rodando los ojos. "Es solo que me habías contado..."

Jungwoo dejó la frase abierta. Cuando eran esclavos en la misma casa, una noche, Ten le había contado que cuando era pequeño, uno de sus dueños había intentado abusar sexualmente de él. Jungwoo recordó lo mucho que habían llorado esa noche, porque Ten había tenido la desdicha de nacer esclavo, es decir que su madre era esclava entonces él directamente heredaba el estatus, así que cuando el tipo había intentado abusar de él, Ten era solo un niño.

"No fue fácil." dijo Ten con una sonrisa pequeña en su rostro y siguió preparando los bocadillos para ocupar sus manos. "Me tomó un buen tiempo en confiar en él, pero luego me di cuenta de que realmente me quería y que yo lo quería a él. Así que confié y fue la mejor decisión."

Después de aquella conversación, habían salido de la cocina con los bocadillos en manos. Los colocaron en la mesa y Jungwoo se sentó de nuevo en los regazos de Yukhei.

El sentir su brazo posesivo rodearlo por la cintura una vez más habían provocado que su cuerpo se estremeciera.

Ahora al verlo en el auto, concentrado en la carretera, se tomó el tiempo en admirarlo.

Realmente Yukhei era el chico más guapo que Jungwoo había visto. Su cara perfilada, su fuerte mandíbula, sus profundos y grandes ojos y su cabello salvaje se complementaban a la perfección.

Miró la mano que tenía el mayor sobre su rodilla y admiró la manera en que las venas se sobresalían de ella. Miró su brazo y observó como sobresalía el músculo del bícep.

Jungwoo sintió un cosquilleo en su bajo abdomen al recordar cómo se sentían aquellos brazos alrededor de su cuerpo y cómo se sentían aquellas fuertes manos sobre su piel.

Devolvió su mirada al rostro de Yukhei y se quedó mirando fijo sus labios. Carnosos y brillantes, y recordó la manera en que se sentían aquellos labios sobre los suyos.

「libérame」 「luwoo」 「terminada」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora