Capítulo catorce- "El regalo"

35 3 0
                                    

Una vela aromática tendría que haber sido lo que me deberían haber regalado en algún momento de mi vida, pero no era lo que más necesitaba.
No, no lo era. No lo era, porque, ¿de qué me hubiera servido en mi día a día?
Lo que de verdad me hacía falta, lo que realmente ansiaba, era esa confianza que tanto anhelé siempre en mí misma.
Ese regalo sería el más preciado que me podrían haber hecho para el resto de mi vida.
El más preciado...
Creo que hubiese tenido una vida mucho más llevadera. Una vida en la que yo podría haber sido la protagonista de todas mis decisiones, en la que hubiera confiado en mis propias capacidades, en la que no me hubiese rebajado ni me hubiera sentido inferior a los demás.

Hay una frase de "Siempre el mismo día", una película preciosa, que hace un llamamiento a todas esas personas que no creen en ellas mismas y necesitan un poco de ánimo: «Si pudiera hacerte un único regalo para el resto de tu vida, te regalaría confianza en ti misma.»
Me quedo con éso, con que la autoestima y la confianza en una misma, en mi caso, es el primer paso para ser feliz, para poder llevar una vida plena y alcanzar tus sueños.

Hay una frase de Emma Watson que dice así: «Si no soy yo, ¿entonces quién? Si no es ahora, ¿entonces cuándo?»

Deseo que te hagas esta pregunta en tus momentos de duda e inseguridad.

Pregunta que puede propocionarte más valía de la que crees.

Gracias a todos estos pensamientos me siento un poquito más confiada en mí misma.
Pero sólo un poquito.
Un poquito, que va a ser conocido como el instante en el que la protagonista de esta historia comenzase poco a poco a tomar las riendas de su vida.

~LA PLAZA DE LA PASTORA~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora