Capítulo 5

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Una semana después, recibí una llamada de Ally para ir a la discográfica y tratar algunos temas del tour, entre ellos, decidir las canciones que cantaría.

Vanessa no lo dudó ni un segundo y se apuntó al plan nada más saberlo, cosa que no me importó ya que así pasaríamos más tiempo juntas. Pero sabiendo su estado actual, no creía muy conveniente que lo hiciera.

- Anoche creo que nos pasamos con la despedida de las chicas de Little Mix.

- ¿Nos? Más bien TE pasaste. Te volviste loca bebiendo todo lo que encontrabas como si no hubiese un mañana. Si incluso utilizaste un florero como vaso Vany, un maldito florero, solo para hacerte un súper cubata que no te duró ni dos minutos.

- ¡Era un reto, maldita sea! Agh... Y deja de gritarme, estúpida, que me duele la cabeza - se llevó las manos a las sienes para hacerse un pequeño masaje.

- Si de verdad te estuviese gritando, te hubiese explotado la cabeza hace mucho. Pero vamos, solo a ti se te ocurre aceptar todos esos tontos retos aún sabiendo cómo sueles despertar al día siguiente - frené ante un semáforo en rojo y vi como Vanessa se recargaba en el cristal de la ventanilla con los ojos cerrados.

- Yo qué sabía que tenía que madrugar hoy y acompañarte a ver a Ally.

- Nadie te ha dicho que tuvieses que venir conmigo. Te has autoinvitado tú sola.

- Eso es verdad - rió con suavidad para centrar su mirada en mi - Pero no iba a perder mi oportunidad de conocer en persona a la zorra de Carson.

- No creo que esté. Ally me lo hubiese dicho.

- Como si la duendecilla fuese vuestra niñera para saberlo. Aunque durante el tour lo va a ser seguro. La que le espera a la pobre - se burló mientras retomaba la conducción por las calles de Los Angeles - Aunque no sé qué sería peor, si sufrir vuestras peleas o un romance inesperado.

- Estás pidiendo a gritos que te tire del coche en marcha. Si es lo que pretendes, continua con ese tipo de bromas.

- Mira, así practico para cuando tenga que hacer escenas de riesgo - se rió de su propia broma para luego quejarse por el dolor.

- ¿Qué clase de pastilla dices que te has tomado para el dolor de cabeza? - desvíe la mirada un momento para verla sonreír.

No sé cómo podía ser así incluso teniendo resaca. La gente normal no tiene ganas de reírse ni de hacer nada, en cambio ella era todo lo contrario. Aunque bueno, Vanessa no era normal.

- Idiota. No tomo nada de eso. Lo sabes muy bien. Soy una chica sana sino mira que cuerpazo tengo - volvió a reírse haciéndome sonreír ante su evidente momento de subirse el ego sola.

- Eres imposible Morgan - negué divertida.

- Antes de ir a la discográfica, ¿podemos pasar por el Starbucks que hay al lado? Necesito abundante cafeína para esta mierda - volvió a cerrar los ojos mientras se llevaba una mano a la frente.

- Solo porque yo también necesito café.

Unos minutos después, estacioné el coche en el lugar indicado, entramos al local e hicimos nuestros pedidos.

- ¿Y dices que sólo estarás tú ahí? - me preguntó de nuevo. No entendía tanta insistencia en ello.

- ¿Por qué tanto interés en que ella esté presente?

- Solo es curiosidad - puso una cara inocente que me hizo suspirar.

- Espero que no. No tengo ganas de encontrármela. Bastante tendré con aguantarla en el tour - puse los ojos en blanco, apoyándome en el mostrador.

Love Is The Name (Sofía Carson y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora