Luna

La recagaste

En busca de un significado que halla causado su partida la luna le mira mientras duerme, lo hace de reojo y cuando este está a punto de despertar se gira. Es curioso, nadie desde su supuesta conquista se había tomado la molestia de dirigirse hacia ella, ni mucho menos se había quedado 5 días enteros sin oxígeno (y contando).

Hasta antes del aterrizaje de Eugenio Santiago la Luna sólo conservaba una bandera de un país que le resultaba insignificante, sólo un grupo de personas con los conocimientos necesarios para llegar a la Luna y publicar en el periódico

"El hombre está listo para colonizar"

¿Colonizar qué? ¿mejorar en qué? A la luna le parece absurdo que desde su puesto pueda observar por un par de horas al montón de niños indigentes, migraciones, ancianos abandonados, todos sufren mientras en su lugar el grupo de personas invierten millones para escapar de ese lugar, de su realidad, cómo Eugenio.

La luna ha escuchado un par de veces el buzón de voz de su celular y ha respondido a la caseta (sin hablar) sólo para ver que es lo que tienen que decir al respecto. Dentro de la serie de llamadas se han escuchado oraciones cómo:

· "Que tal Eugenio, quisiera programar una cita para poder realizar una entrevista entre más de un millón de tele-videntes por escuchar tu historia de superación",

· "Bueno, Eugenio... Hijo soy yo, ¿no te has llevado el móvil? Juana me hizo el favor de marcarte, ya vez que yo no sé de esto, ya regresa...",

· "¡Eugenio pero que te has creído! Baja inmediatamente, necesitamos hablar, ¿Cómo es posible que dejes a tu madre sola en su condición? ¿Ya te has enterado de lo que le sucede a tu hermana? Eres un desagradecido, después de todo lo que te hemos dado para que salgas adelante",

· "Hola excelente día por las alturas, te amamos, queremos ser como tú",

· "Buenas tardes, tenemos una oferta millonaria, necesitamos que asistas a nuestro programa para poder platicar sobre tu llegada a la Luna, nos parece una maravillosa hazaña y como todo el mundo está atento a ti es seguro que causas mucho raiting, ¿qué te parece?".

La Luna no comprende, atiende las llamadas, abre los buzones del celular y atiende a las publicaciones que hablen acerca de él para buscar un poco de significado a su labor. Le mira confundida, a veces con odio y hasta con desprecio, de tener extremidades ya lo habría mandado de vuelta a la Tierra a manera de meteorito para que dejen de molestarle con esos juegos artificiales que cada tercer día celebran su nombre.

Eugenio despierta, limpia la saliva seca con más saliva, se talla los ojos antes de mirar a la Tierra y levanta la caja de cartón con la que salió de su hogar, es jueves, se prepara para la recolección de Magma y poder salir de inmediato hacia un lugar más alejado. Mientras, el silencio se vuelve una pesadilla, la Luna se gira por completo para mostrarle a Eugenio su tonalidad más obscura y lúgubre. Le dice:

-La recagaste