Capitulo 3

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Reestructurar

Me he estado sintiendo muy afectada. Las vueltas de la vida y los cambios que en mi camino he tenido que asumir han sido uno mas alto que el anterior. La perdida de mi padre, mi hermano y la de Demiam, me han tenido por mucho tiempo bastante afectada, debatiéndome entre ¿Cómo debería continuar mi vida? O ¿Cómo debería cambiar el rumbo de la vida en mi pueblo? Estar en esta posición me hizo darme cuenta de lo débil que realmente soy para enfrentarme a mis propios demonios y responsabilidades. Y del poco control que tengo sobre mi comportamiento y actitudes.

Actualmente me encontraba en la oficina reunida con Isabella y su madre para por fin continuar con nuestras labores para con el pueblo de Queenstown y así yo misma poder hacer valer el legado de un hombre que siempre antepuso a su familia y su gente.

-Tu en serio piensas que a mi se me olvidaran todas las desgracias que han llegado a mi familia gracias a ti-soltó déspota la señora-Acabaste con la reputación y el posicionamiento de una familia intachable Megan, estas sola no cuentas conmigo para nada que tenga que ver con el restructuramiento de Queenstown.

-Para mi no es problema no contar con ustedes-conteste seria-Solo estaba siendo cortez para que usted e Isabella pudiesen seguir ocupando lugar en la mansión, como la familia real y honorable que usted profesa eran.

-¡A mi tu no me hables con sarcasmo!-desahogo la mujer parándose molesta de aquella silla frente a mi-Me debes respeto.

-¡No!-sonreí-Usted me debe respeto a mi. Actualmente estoy a cargo de una manada que debe ser restructurada y que merece un mejor vivir, un estilo de vida digno en donde todas las especies sobrenaturales podamos coexistir. No se si en su época aquella posibilidad estaba dentro del pensar de su esposo y su familia. Pero para mi al igual que Demiam es importante llevar acabo este plan. He cometido errores, le falle a mi mate, a mi familia y a mi pueblo. Yo solo quiero levantarme todos los días creyendo que aun hay solución aunque tenga que entregarle mi vida a esta causa. Despierto con dolor en el pecho al no tenerlo a el junto a mi-señale la foto de Demiam e Isabella que reposaba en el escritorio-Me duele y deseo hacer algo al respecto, la vida y nuestra madre no lo pondrá en nuestro camino de nuevo, pero si quiero comenzar hacer algo al respecto, por sus creencias y por el hombre que era.

-¡Como te atreves hablar así de el!-grito-Nunca lo respetaste, mi hijo dejo su vida en esta mansión por este pueblo por cuidar de el y ahora tu quieres fingir que vas a hacer algo por el pueblo jugando con su nombre.

-Te recuerdo que como reina de Queenstown las decisiones las tomo yo a partir de ahora. Y rendirle honor con mis actos es lo que quiero hacer. Cumpliendo con sus creencias y el plan de nuestra madre. La diosa luna tiene un plan perfecto y yo solo debo llevarlo a cabo. Si quieres estar de mi lado bienvenida seas pero si no, yo misma te busco lugar en la ciudad para que comiences una nueva vida en paz.

-Isabella estas de acuerdo con esto.

-No pero por el honor de Demiam y mi padre permaneceré aquí, luchando por la libertad de mi gente.

-Yo no quiero continuar en un eterno debate con usted, solo deseo poder llevarnos mejor. Si usted me lo permite yo le ofrezco una buena vida en la ciudad, sino esta de acuerdo con mis decisiones para con el pueblo. Mientras que por otra parte si quiere cooperar cuente con que estaré muy agradecida con usted por respetar a nuestra gente y lo que este pueblo significa. Tal vez para usted mis palabras suenen como una burla a la historia que precedía a su familia. Pero entienda yo se perfectamente como se siente y se perfectamente como piensan. Isabella y usted, no me tendrán fuera del trono. Saldré de esta mansión muerta antes de no hacer nada por el bienestar de un pueblo inocente-finalice mirándola desafiante.

El Trono de Queenstown: La Llave © ✔ - Editando**Donde viven las historias. Descúbrelo ahora