Estaba tirada en el suelo de la habitación de Nick, con él haciendome cosquillas encima mía.
- ¡Para! ¡No puedo respirar! ¡Por favor!- dije entrecortadamente, mientras que no podia parar de reir.
- Primero admite que yo soy el chico más guapo que has visto.
- No quiero mentir.
- Entonces sufriras toda mi ira.
Me agarró de la cintura y me puso en la cama, debajo de él.
- ¿Seguro que no lo admites?- dijo mientras rebuscaba en el cajón, y escondia algo entre sus manos, detrás de la espalda.
- ¡Mi madre me enseño a no mentir!- le dije sonriendo con autosuficiencia.
- ¡Tú te los buscaste!
En sus manos sacó unas cuerdas, y aunque era bastante rápida, no lo fui lo suficiente para que no cogiera rápidamente y me atara las manos a la cama.
- Becki, Becki... ¿Que haré contigo? Te quedarás hay hasta que admitas que yo soy más guapo.
Negué con la cabeza, y me tumbé para estar más agusto. Si pensaba que iba a decirle eso, estaba equivocado. Si, soy demasiado orgullosa. Asi qué, supongo que iba a pasar una temporadita. No me importaba.
- Venga ya Becka. Si sabes que te gusto.
- ¿Perdón?- dije fingiendo que estaba ofendida- Eres tonto, superficial, engreído, sexy, atento.. ¿He dicho eso en voz alta?- dije con las mejillas tellidas de color rojo.
- Asi es mí querida Becki. Por decirme eso te ganas un beso.
Le iba a responder en mi tono borde, pero él estampó sus labios con los mios, haciendome olvidar todo.
Se tumbó encima mía, y pude sentir como sonreía mientras estaba contra mi boca. Empezo a levantarme un poco la camisa, mientras sus manos rozaban mi barriga.
Lo paré y lo miré a los ojos. Yo tambien queria, si, lo estaba deseando. Pero ahora no era el momento.
- Yo..
- No quiero que te disculpes. Es solo que este no es el momento, y no quiero ser “otra más”
- Becka- me dijo mientras me hacia mirarle a los ojos- Tú eres diferente, todo en ti es diferente. No eres otra más.
Sus palabras, me hicieron sonreir como hacia años que no lo hacia. Supongo que me caia bien, solo eso... O al menos trato de convencerme de aquello.
No me salieron palabras, no salieron. Quería que salieran, pero no estaban. Se habia evaporado. Agache la cabeza, algo confundida, intentado poner mi mente en orden. Pero no podia.
Nick estaba sonriendo triunfante, pero no le llegó a los ojos. Ojalá supiera lo que pasa por su mente.
NICK POV.
Lleve hasta Becka hacia la puerta, y me despedí con un simple beso en los labios. Sonreia, y amaba cuando sonreia, sé que no puedo quererla, pero no me importa.
Cuando estoy con ella, es como si nada existiera, más que ella y yo. Ella y su cabello de rapunzel, sonrei. Sonrei, pensando que cuando le decia asi se enfadaba conmigo, porque ella “no es una princesa” Si, lo era. Era, y es mi princesa.
- Oye Nick, ¿has visto mi camiseta negra?- me interrumpió la voz de Tom
- Te he dicho por lo menos cincuenta veces en lo que va de día que no, tú sabrás donde has puesto la camiseta.
