Allen se sentía como en el cielo al sentir la danza de sus labios con los del mayor, creía que iba a desfallecer; se separaron e inmediatamente el albino lo abrazo pues no soportaba la vergüenza.
-¿Qué haces?- preguntó Kanda confundido.
-S-sólo no se lo digamos a nadie- susurro el menor.
-No digas cosas tan obvias, pedazo de idiota-
-Lo siento, yo no sabía como reaccionar ante esto, tengo muchas dudas y...
-Ya cállate sólo actúa como si nada- El Samurai lo aparto y se levanto de la cama.- Debemos terminar con esto y regresar a la orden- Allen asintió con las mejillas color rojizo.
Volvieron a dónde estaba la inocencia, encontrando cientos de akumas en el lugar, se apresuraron a tratar de combatir con aquellos monstruos devora almas. Estaban tan concentrados en lo suyo que no se dieron cuenta de que alguien los vigilaba.
-Mira nada más a quienes me vine a encontrar, nos vamos a divertir mucho- pronuncio aquella persona desde las sombras.- Allen serás completamente mío y te quitaré de ese afeminado- Comenzó a reír maliciosamente.
Kanda recuperó la inocencia de en cuanto acabo con akumas de nivel tres
- Es hora de irnos- dijo guardando aquel objeto tan preciado
-Sí, pero debo regresar a la posada se me ha olvidado algo- el albino se rasco la cabeza.
-Puta madre, Moyashi, se verdad eres un inútil-
-Cállate y acompáñame-
Los dos exorcista regresaron a aquella choza tan acogedora, pero había algo raro ahí, todo estaba en silencio como si estuviera apagado, con cuidado entraron a su respectivo cuarto
-Te estaba esperando, querido Allen-
Notas de la autora
Lamento que el capítulo sea tan corto pero al no actualizarles nada me sentía mal, pero hey, el próximo capítulo será mucho mejor lo prometo
En serio los amo 💕
-LA LOCA DEL YULLEN ❤️
