Cap 7

283 24 0
                                    

-¿Quien eres?-Sus ojos se me clavaron como cuchillas, sentí un gran peso en el estómago.Comencé a abrochar y desabrochar el botón de mi peto, quiero decirle "hola, soy tu nakama, mi nombre es René" pero solo pensar en hablarle hace que se me ponga más nerviosa. Bajé la cabeza hasta que sólo pude ver el suelo y no la imagen del peliverde.Era intimidante, me produce bastante miedo, noto fuerza en su mirada.Tres largas espadas cuelgan de su cintura, músculos perfectamente definidos y marcados por todo lo visible y no de su cuerpo. No duda en ningún momento, me empuja y siento el choque de mi cuerpo contra la pared justo en la cabeza. Luego todo comienza a dar vueltas, me agarra por una pierna y arrastra mi cuerpo por unos pasillos desconocidos. No pasamos por donde Franky, los pensamientos son lentos y confusos, no aclaro mis ideas hasta que veo dos grandes focos de luz encima mía. Un líquido caliente resbala por mi oreja, palpo esta y veo un manchon rojo muy difuminado en mi mano. Sangre... ese espadachín. Ví el difuminado pelo rubio de Sanji y un gran golpe, tambien voces pero no son distinguibles para mí.Ahora mismo solo quiero dormir, un gran sentimiento de sueño y pesadez me baña, los ojos, son pesados y me pican. Alguien me mueve pero es lento, no propio de lo que se suele hacer en estos momentos. ¿Levito? ¿Estoy volando?...Negro absoluto.

La luz que se cuela entre las cortinas me abrasa los ojos, mi cuerpo dolorido pesa y noto su debilidad. La cabeza me late. Al incorporarme y analizar donde estoy veo que Tony Tony Chopper, el médico está durmiendo a mis pies.

—To-to-ny To-to-n-y Cho-ch-cho-pp-rr—El reno, abrió los ojos, eran negros y profundos. Me miraron dulces y compasivos, como si yo fuese un cachorro abandonado.

—Hola, René-pone más enfesis a mi nombre, no me acuerdo si ayer les dije como me llamaba, solo recuerdo un par de fragmentos, todos borrosos y parecidos.

—¿Te acuerdas de algo?-niego, se incorpora y revuelve en su azul mochila. El sombrero rosa a desaparecido de su cabeza,ahora parece más que nunca un animal.

—Es un antiflamatorio, dura ocho horas.—Asentí y tome el medicamento.El reno tocó una campana, como la de la torre de vigía y Sanji entró atropeyadamente en la habitación.

Mejórame...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora