[WISH TREE] chuuves

23 de Diciembre

Dos días para navidad

Jiwoo había ido a casa de Sooyoung por la tarde, ya que habían acordado ir desde ahí a la fiesta. No era una situación tan elegante, pero si algo formal, por la que traía un una blusa verde obscuro y una falda bordó que usaba solo en ocasiones especiales. Si le prestabas atención, te dabas cuenta que se vistió con los colores de la navidad (lo había hecho a propósito, pero supuso que Sooyoung no lo notaría).

Llegó demasiado temprano, puesto que Sooyoung aun no terminaba de cambiarse, y tuvo que esperar en el living.

Puso su atención a la esquina de la ventana, donde había un pequeño peluche de cisne bebé. Ya lo había visto antes y le había dado atención, pero nunca lo había tocado. Justo cuando lo agarró, entró Sooyoung a la habitación.

—¿Te gusta? Le puse Yves. Es un cisne, aunque no se nota tanto.

—Si me había dado cuenta, es muy tierno, amo los pequeños peluches, ¿Te gustan los cisnes?

Jiwoo había notado desde hace días que la casa de Sooyoung tenía pequeños cisnes por doquier. Además del peluche, había algunos otros en decoraciones y objetos. No eran muy obvios, Jiwoo lo había notado por la cantidad de veces que analizó el lugar.

—Si, dicen que parezco uno, además de que me gusta mucho el cuento. —comentó agarrando su bolso ya preparándose para irse. —¿cuál es tu animal favorito?

—¡Amo los pingüinos! También me dicen que parezco uno.

Jiwoo dejo a Yves en su lugar y salió junto a Sooyoung de la casa. Caminaron hasta la parada de taxi de la esquina y fueron a el hotel.

El lugar si bien no era elegante, estaba preparado de una forma hermosa. El centro estaba desocupado, seguramente para cuando la gente empiece a bailar, y en los bordes estaban las mesas. Se sentaron en una junto a una ventana para ver la nieve.

Jiwoo estaba muy feliz, aunque la comida no era tan buena, el ambiente era muy lindo y navideño. Lo mejor fue cuando fueron a la pista con Sooyoung y bailaron, eran canciones movidas que estaban de moda en el momento, por lo que se divirtieron y rieron. Ese día Jiwoo descubrió que Sooyoung era fanática de Sunmi y se sabía todos sus bailes.

Lo que Jiwoo tampoco sabía es que darían bebidas con alcohol junto al postre. Ella sabía que no se controlaba bien, sin embargo decidió tomar un poco. Un poco mucho.

Aunque Jiwoo ya no estaba muy sobria, no fue un impedimento para que sigan disfrutando. Sooyoung cuidaba que no pase nada malo y se divertía con lo que decía, si Jiwoo de por si era enérgica de forma normal, eso se acrecentaba ahora.

La estaban pasando tan bien que no quisieron volver hasta que vieron a la mayoría de las personas dejar el lugar.

Ya venían caminando hacia otra parada de taxi, Sooyoung yendo con calma y una sonrisa divertida mientras Jiwoo a su lado le mostraba sus bailes del fornite a la vez que caminaba.

—¡Este es mi favorito! —dijo y comenzó a saltar en un pie mientras avanzaba hacia adelante, cuando casi se tropieza en la nieve.

Hace mucho tiempo que Sooyoung no se reía tanto, y venía teniendo unos malos días. Estaba agradecida con Jiwoo por simplemente, ser ella y hacerla feliz.

Se habían bajado del taxi y tenían que caminar unas cuadras hasta la casa de Sooyoung. Ya eran cerca de las 4am, por lo que debían tener cuidado.

Jiwoo hablaba en voz alta, cuando Sooyoung vio a alguien sospechoso en la cuadra de enfrente. Trato de disimular y hacer como que escuchaba a Jiwoo, cuando en realidad estaba prestando atención a las acciones de aquel tipo.

El sujeto cruzó la calle hacia la vereda donde estaban ellas, y Sooyoung acelero el paso.

—Entonces Yerim dijo ¡Rwa! Pero no le salió tan bien como a mí...

—Jiwoo, tenemos que correr ya hasta la casa —le susurró Sooyoung a Jiwoo interrumpiéndola.

Al principio no entendió, pero Sooyoung la tomo de la mano y comenzó a correr junto a ella. Cuando se dio cuenta ya estaban entrando rápidamente en la casa de la mayor.

Desde la ventana Sooyoung vio como el tipo llegaba, seguramente había corrido tras ellas, se cruzaba de vereda y se quedaba ahí, mirando hacia su casa. Era probable que se quedara un buen rato, no iba a ser seguro que Jiwoo se volviera sola caminando.

—Vas a tener que quedarte, mañana te explico bien.

Jiwoo estaba pensando en tantas cosas irrelevantes en el momento, aún confundida y un poco mareada por correr, que ni siquiera le pareció raro lo que dijo Sooyoung. Sonaba a piyamada.

—No tengo más que una habitación, pero la cama es para dos personas, espero no te moleste, pero si quieres puedo dormir en el sillón y te la dejo.

Entre lo poco que entendía Jiwoo supo que no podía desaprovechar esa oportunidad. Se sentiría algo culpable luego, pero no podía negarse en ese momento.

—No no, no hay problema ¡es tu casa! No puedo hacerte dormir en el sofá.

Entonces subieron, y Sooyoung le prestó un piyama de ositos.

Jiwoo se durmió profundamente a penas recostarse, y Sooyoung se quedó pensando en cosas como siempre antes de dormir.

Miro por la ventana como caía la nieve, y miro como la luz anaranjada de la calle tocaba levemente la cara de Jiwoo. Se veía bastante tierna durmiendo.

Mañana ya sería 24, y por la mañana comprarían los ingredientes de la cena. La verdad, estás fiestas estaban siendo buenas por una parte para Sooyoung. Tal vez no le gustaba tanto la navidad, pero si le gustaba pasar tiempo con Jiwoo.