Un Dragón Entre Los Pecados Capitales . (Ban)

Capítulo 16

Blu, había pasado todo el día en su cuarto. Sin Ban, que la llevase a dar un paseo, hacer la comida o entretenerla sin más, ¿que haría?. A lo lejos escuchó como se abría y cerraba la puerta. Saltó las escaleras y dió unos cuantos pasos para equilibrarse, levantó la cabeza y lo único que vió fué a Merlín.

-¿Por qué tienes tanta prisa? - Cerró con fuerza el libro y flotó al rededor de ella, todos sus músculos se contrayeron. Meliodas asomó con tímidez la cabeza y sonrió sacudiendo la,Elizabeth estaba descansando con los brazos cruzados sobre la barra,pasó su mano sobre la cabeza de la peliblanca y esta despertó.Al rato Blu volvió del trance en el que estaba.

- ¿No te gustaría estar así con alguien? - preguntó casi entre susurros Merlín.

-Los de mi raza no nos relacionamos así.-La guerrera enchió el pecho-Las mujeres tenemos una posición social más alta que los hombres y durante las fiesta celebramos unas "bacanales" si quieres llamarle así.

-¿Como os relacionais?-Merlín abrió los ojos de una manera estrepitosa y sentó a Blu en una de las mesas mientras Escanor limpiaba la barra fingiendo no atender.

-Las mujeres de mi pueblo eligen una pareja para traer descendientes y cuando esta misión se ha cumplido y están hábiles para pelear el hombre se queda con las crías.-Blue se echó para atrás.-Las mujeres podemos tener más parejas sexuales si lo deseamos debido a que lo más importante es que perviva nuestra especie.

-¿Has llamado a los bebés crías?-Le cortó rápidamente Merlín

-Nosotras parimos en nuestra forma primaria, que sería la de bestia y por ende damos a luz huevos-y antes de que Merlín la volviera a cortar-Solo las hembras podemos transformarnos.

Merlín lo anotó todo e hizo que el Escanor trajera dos cervezas-De todas maneras,¿ a que has venido?-La hechizera dibujó una media sonrisa en su cara.

-Viene por que escuché a alguien entrar.-Serio entre dientes

-¿Desde tu cuarto? -Asintió la peliblanca. - ¿Escuchaste la puerta abrirse desde tu cuarto? - volvió a asentir.

-¿No entró nadie? - preguntó ella.

-Ban.-Meliodas se puso a cocinar y Elizabeth le intentaba ayudar. La guerrera apretó el vaso de la bebida,¿Ban... No quería verla? ¿No querí dar un paseo? ¿No quería estar con ella? Notó un pinchazo en el pecho la sensación de que algo se le quemaba por dentro, esa misma sensación salía del centro de su organismo y se extendía por todo su ser subiendo hasta sus mejillas.Un estallido de rabía en su interior, germinó el reencor y la tristeza. Merlín chasqueba los dedos delante de ella.

-Así que es el eh-La de pelo negro masticó las palabras,todos en el bar atendían a la conversación.

Blu que se sentía avergonzada y con el orgullo herido al mostrar interés en alguien respondió-Solo es por preservar la estirpe, tenía pensado...bueno-se rió para si y bebió de la cerveza. Elizabeth miró a Mediodas y este habló por ambos.

-Puede que Ban se haya mostrado amable y todo lo que tú quieras...-Escanor limpiaba u basó y miró a Merlín quién dirigió su mirada a la peliblanca en signo de compasión y empatía- pero olvídate de el...es territorio que no vas a pisar.

-Pronton lo veremos- Ahora sí se sentía herida y menospreciada,se acabó su cerveza de una y se levantó violentamente de la silla la cual cayó al suelo, mientras todavía rebotaba Blu llegó a la habitación de Ban y dió dos golpetazos a la puerta. A punto de romperse estuvo. El peliblanco al fin se hizo ver, con gesto triste y los hombros caídos, miró a Blu con asco.

-¿Que quieres? - escupió las palabras.

-Dar un paseo. - entró a la habitación aunque Ban no le dejara espacio-Te veo triste¿donde has estado?. -Estaba enfada y quería hundirle el butacón encima solo.por como le había mirado,pero se contuvo.

-¿Desde cuando te importa?-Se tumbó mirando al techo.

-Puede que en verdad más de lo que aparente... - La de ojos claros se sentó en la cama.

-Una novia que tenía y una ruptura jodida... Sentimientos-se giró y quedó mirando la ventana.

-¿Quieres hablar?-preguntó ella de nuevo.Estaba más calmada ya. Ban no emitió ningún sonido, ningún gesto... Se quedó mirando la ventana. - Vale, buena charla.