Suspiros [Sciset]

Noveno suspiro

De esa manera, el tiempo comenzó a pasar tranquilamente. El día sábado fueron a buscarle un trabajo matutino a Sunset, quien encontró agradable trabajar disfrazada de pollo en la puerta de un restaurante de comida rápida. Twilight rió mucho cuando la vio con aquél traje emplumado de amarillo; pero veía a Sunset tan feliz que prefirió no poner objeción.

Twilight: mira ese pico. -Reía la peliazul mientras veía el gorro Sunset que usaba en la cabeza, con unos graciosos ojos saltones y el pico que sobresalía.-

Sunset: me agrada esto. -Decía mientras terminaba de cerrar el traje, tapando su cara por completo.-

Fue así como le consiguieron un trabajo a Sunset. Twilight llevó a la morena a mirar departamentos o algo así cerca de su casa, sin decirle realmente el por qué o el para qué. Aquél domingo la pasó la mayor parte del día con su hermano, quien era muy amable y bueno, solía molestarle como todo hermano; pero debido a que ellos vivían solos, había tomado un papel más de "padre" de los fines de semana. "Cada semana te veo más grande Twily ;D" Decía.

En la escuela todo iba diferente pues en los recesos, Starlight iba y se sentaba con ella en la banquita alejada del patio. Twilight comenzó a acostumbrarse a ello y poco a poco iba entendiéndose mejor con la pelimorado, descubriendo que resultó ser buena para escuchar. Starlight le contaba de todo, cosa con la que Twilight se dio cuenta que después de todo aquella chica no era tan mala como aparentaba y sobretodo, que ciertamente le incomodaba la situación con su maestra.

Starlight: Chrysalys es algo... no sé... siempre quiere hacerlo, en cualquier momento quiere... tú ya sabes... antes del descanso me envió un mensaje al celular para que la buscara en su oficina; pero yo no quise esta vez...

Twilight: ¿Se lo dijiste? -Le preguntó la peliazul.-

Starlight: se molestó mucho cuando le dije que debíamos dejar de aventurarnos a hacerlo en cualquier lugar de la escuela a cualquier hora y que más bien deberíamos reunirnos en las tardes... para ello...

Twilight: espera. -La detuvo la peliazul.- ¿Qué no se ven en las tardes?

Starlight: a veces... pero muy pocas veces la verdad. -La pelimorado miró a Twilight fijamente.- ¿Crees que Chrysalys esté jugando conmigo? Ella es mayor y es muy guapa... ¿Crees que ella sólo me utiliza? ¿Qué hace lo mismo con cualquier chica en cualquier momento en que se le antoje?

Twilight: no lo sé...

Pero Twilight sospechaba que eso era cierto, pues con lo que le contaba Starlight, asumió que la maestra sólo la llamaba para tener sexo en el momento en que se le antojara. No parecía que siquiera cruzaran una palabra antes de ello y según lo que decía la pelimorado, al principio le gustaba; pero realmente se había vuelto en una rutina casi dolorosa.

Respecto a Sunset, Twilight no podía quejarse, se llevaba perfectamente con ella, de maravilla. Ahora cuando se encontraba con ella a la salida de la escuela, llevaba una mochila en la espalda donde estaba su uniforme de pollo. Pero se trataban y se hacían cariños como si fueran una hermosa y feliz pareja. Sunset al ser un ángel, nunca se enojaba con Twilight, siempre le sonreía, le miraba dulcemente. Sentía aquél amor humano, tan diferente, tan dulce, tan emocionante.

Iban a todos los lugares juntas, un sábado por la tarde, se tomaron unas cuantas fotos en aquél parque donde se habían hablado por primera vez. Sunset empujaba a Twilight en el columpio mientras charlaban de todo tipo de cosas. La peliazul aún le explicaba ciertos aspectos de los humanos; pero ahora Sunset entendía mucho más rápido. Twilight se preguntaba si ella podría volverse humana por completo en cualquier momento y cambiar drásticamente.