capítulo 8

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Umugülsum Kalfa caminaba con prisa por el harén del şehzade Mustafa, tenía una ordenó buscar a la concubina indicada para el şehzade, una inteligente y que sea sumisa ante Dilaşud sultán, las formó en una perfecta fila y las fue revisando de pié a cabeza, había muchas agraciadas y otras que carecían  de belleza, rubias, morochas, pelirojas, con pecas, y grandes labios, bajas y altas, eran simplemente hermosas, el sueño de cualquier que este fuera de estas paredes estaba en Maniza con las mujeres más hermosas.

- ¿ Pasa algo Umugülsum kalfa?- dijo una de las nuevas

-¿ Qué pasa, que pasa?- las miró-  tengo una misión que cumplir- murmuró- ¿Cómo te llamas?- señalo a la última

- Fátima-  dijo con un perfecto asentó polaco

- Ponte a mi derecha- murmuró-  ustedes dos de donde son?

- Yo soy de españa, me llamo Dayana- dijo

- Yo soy de Italia, soy Rocío-  susurró bajó-

- ambas a mi derecha, ustedes dos también, bailarán para el şehzade, iran con la costurera de inmediato-  las empujo y se fue de ahí con ellas detrás

- Tengo que jugar bien mis cartas- dijo Dilaşud a zeynep- tengo que buscar a mi sucesora para tener protegidos a mis hijos, no me puedo dar el lujo de que envenenen la alma de Mustafa

- La encontrará no se preocupe-  dijo Zeynep- las señoras de la Fundación han pedido tener una audiencia con usted por el aniversario de la Fundación que esta pronto a hacerse

- Diles que está bien, iré mañana temprano para que hablemos sobre eso- suspiró-  dónde esta nuestro sultan?

- con Mehmed paşa -le miró

- iré con mis hijos- murmuró yéndose

Seis jóvenes se preparaban para bailar para el sehazde şehzade Mustafa, todas se miraban serías y con recelo, todas anhelaban conseguir el mentado pañuelo de la suerte, si alguna lo conseguía pasaría la siguiente noche con el şehzade y si tenía más suerte podía convertirse en más que una favorita.

Todas ingresaron en fila y con la cabeza baja, se posicionaron en sua lugares y las muchachas comenzaron a sonar sus instrumentos y ellas comenzaron a mover sus caderas con  sensualidad, pero sólo una conectó la mirada con el şehzade.

"Una nueva era comenzaba"

El Sultanato de Mustafa el cruel© Donde viven las historias. Descúbrelo ahora