Narra Saliha Dilaşud sultán.
Sentí un fuerte dolor y luego sentí que alguien me movía, trate de abrir mis ojos pero el aura tranquila del lugar me hacía dormir.
—Vamos madre, despierta—reconocía esa voz, la voz de mi luz, mi pequeño hijo —madre, despierte no sea floja—inconscientemente Dilaşud sonrió.
—¿Murad?—abrió sus ojos
—Ese mismo madre—sonrió y Dilaşud lo abrazo con todas sus fuerzas
—Mi bebé, mi Murad, León—sollozo—¿Cómo es que estas aquí?
—No, tu estas aquí, en el paraíso—la abrazo
—¿El paraíso?—sonrió —¿Cómo?
—Fuiste la mejor madre y sultana que hubo en los últimos años—dijo Murad—Vamos nos esperan
—¿Quiénes?—dijo Confundida
—Si se mueve tal vez los vea—dijo riendo y ella sonrió para ponerse de pié.
Murad sostuvo su mano y la comenzó a guiar, el lugar era muy hermoso, amaba las flores y la vista, unas risas la hicieron dejar de ver la flores, las conocía, sabía quiénes eran.
—¿Ahmed?—dijo soltando la mano de Murad y corriendo hacía las voces—¡Ahmed!—el mencionado volteó a verla
—Saliha, cariño—corrió a ella —mi amor —susurró.—te haz tardado mucho.
—Tenía que tardar mi amor —susurró y diviso a Atike sultán y a sus hijos.
—Dilaşud—dijo Atike—al fin llegas
—Me alegra verla—sonrió y derrepente más personas comenzaron a llegar—¿Mih? ¿Şah? ¿Kaya, Mehmet, Hasan, Abdullah?—dijo sorprendida
—Madre—dijo Mih corriendo hacía ella
—¿Padre?—dijo Hasan
—¿Cómo es que están aquí?—dijo Dilaşud
—Mustafa madre, el comenzó una masacre—dijo Kaya
—Lo siento Ahmed, me equivoqué con el—bajo la cabeza pero Ahmed la alzó de inmediato.
—No lo hiciste, fuiste una gran madre—la abrazo y luego a sus hijos, a lo lejos Murad regresaba con sus sobrinos, sintió tristeza y alegría.
—Después de todo si fuiste la indicada Dilaşud —dijo Atike sonriendo le, a su lado estaban el sultán Orhan, Zeyenep, Esma, Nilüfer, Şah y sus hijos fallecidos, todos parecían felices y ahora le tocaba serlo a ella.
Sólo bastaron segundos para ver a todos sus hijos ahí, estaba completa, el hombre al que amaba, sus hijos, su felicidad estaba ahí, después de tanto dolor si hubo un final feliz.
Hoşyar fue una buena madre Sultana, perdonó y dejo libre a todas las sultanas y Príncipes,la dinastía después de todo quedo en buenas manos.
Después de todo, el dolor va de la mano con el poder.
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El Sultanato de Mustafa el cruel©
Historical FictionMi nombre es Mustafa, fui el favorito de mi madre y de mi padre, fui criado para gobernar el mundo. Vi la tristeza, el dolor y la envidia que guardaba este Palacio, vi sufrir a mi abuela, a mis tias y a mi madre. Pero yo haré pagar a aquellos que hi...