Look at you |BTS| 2

Capítulo 23

Kim TaeHyung POV

Pasaron un par de semanas desde que había regresado a Corea del Sur y había decidido continuar con "normalidad" mi vida. Estaba en la tienda, trabajando. Reponiendo algunos víveres, cuando en eso escuche la campanilla de la entrada, la puerta había sido abierta, lo que significaba que un cliente había ingresado. Me levante del suelo y limpie mis rodillas, respire hondo estaba por irme hacia la caja y tomar mi puesto, cuando en eso reconocí el aroma de aquella persona.

—Hola...

—¿Q-que haces... aquí?

—Te dije que no te olvidaría. — dijo ella con una tierna sonrisa en sus labios. —Pero al parecer tu ya me has olvidado, ¿o no Kim TaeHyung?

—Pe-pero tu...y yo...

—No se que te hizo cambiar de idea para que te fueras sin decir nada, estuve así por unos días, pero luego un idiota fue a mi casa y comprendí porque te fuiste, dime Tae, ¿Qué te dijo Mark?

—Uhm, pues...

—¿Nuestro compromiso? — dijo la última palabra mientras alzaba las manos al aire y hacia un par de comillas con sus dedos.

—S-si...— asentí con cierta inseguridad, me estaba volviendo a sentir como aquellos días en el cual me encontraba en Canadá.

—Bueno, estoy aquí para decirte algo en concreto.

—Di-dime...

—¡No se que pensaste tras tu visita a Canadá, pero fuiste un idiota! —la forma en como me grito, me hizo retroceder dos pasos, pero cuando escuche como su voz se iba quebrando, mi corazón se sintió igual. — ¿En serio creíste que te iba a olvidar? ¡Responde!

—Bu-bueno, y-yo...

—¡Eres un tonto!

—Lo siento...

—¡Quero pedirte dos cosas más!

—Dime...

—La primera...— ella se acerco lo suficiente hacia mi, el temor me invadió por completo, tanto que no podía moverme. —Que me beses. — dicho eso, ella tomo el cuello de mi polo y lo jalo, haciendo que me incline para que ella pudiera llegar a mis labios, tras un corto beso, lleno de sentimientos por parte de ella, se separo de mi, sentí como mis ojos se iban humedeciendo, realmente había anhelado por tanto tiempo este beso, me sentía tan bien por tenerla enfrente de mi, pero tan mal por lo que había causado por mis acciones que hice sin pensar dos veces las consecuencias y los sentimientos que generaría tanto en ella como en mí. —La segunda, es que... no vuelvas a irte sin mi. — dicho eso, ella me abrazo fuertemente, al sentir su calidez, mi cuerpo se fue descongelando poco a poco, por fin me sentía capaz de poder mover mis brazos, los cuales se alzaron y rodearon aquel cuerpo que empezaba a llorar. Lo siento tanto Sun Hee...

—Tae...— su voz volvió a quebrarse, la escuchaba como se agitaba su respiración. —En serio...— me abrazo con más fuerza. —Te extrañe mucho...

***

Tras lo ocurrido, hice una llamada a mi jefe y le pedí salir por una hora, salí con Sun Hee y nos fuimos al parque más cercano el cual estaba en medio de la tienda y de nuestras casas, sentí que en ese lugar podríamos hablar mejor, en la tienda había cámara de seguridad.

Solo espero que mi jefe no vea las grabaciones, cuando pensé eso, realmente me sonroje de la vergüenza.

—Tae...

—¿Si?

—No vuelvas a hacer eso, ¿sí?

—Uhm...— le sonreí. —Claro.

—Promételo.

—Lo prometo.

—Con el meñique. — ella alzo su mano y me mostro su delicado meñique, no pude evitar soltar un par de risitas. — ¿Qué?

—Has adelgazado mucho.

—¡¿Ah?!

—Creí que el viaje te ayudaría a recuperar tu peso anterior, pero...

—¡Oye! — Sun Hee empezó a golpearme, sin querer la había hecho enfadar, pero no podía evitar reírme, se veía tan adorable como siempre. La tome de sus muñecas y la detuve, me acerque hacia su rostro y la obligue a que nuestros ojos se vieran mutuamente.

—Esto es raro...— murmure.

—¿Qué?

—Recuerdo que era yo quien solía callarte con un beso.

—¿Entonces que esp....?— la interrumpí, solté sus muñecas y rodee su cintura, obligándola a hacer este beso aún más profundo y que no se alejara de mí. Esto me hizo recordar a viejos tiempos. Tras separarnos, tomamos un poco de aire, pero aun no podíamos dejar de vernos a los ojos.

—¿Te... te quedaras, no? — le pregunte.

—No, solo tome un vuelo de Canadá a Cora del Sur para pasar a verte y decirte Hola.

—¿Hablas en serio? — fruncí el ceño.

—Tae, ¿acaso ya te has olvidado de mi sarcasmo? — dijo ella con una risa maliciosa en los labios.

—Oh... llegue a creerlo.

—Eso prueba que aun eres muy inocente. — ella rio, aquella sonrisa que me mataba de felicidad. Ella se acercó a mí y me abrazo. —Realmente te extrañe... ¿tú me extrañaste?

—Otra vez ese sarcasmo. — reí. — ¿Tu qué crees?

—Que no...

—¡Ja! No hubo un día en que no deje de pensar en ti.

—Que cursi...— dicho eso de los labios de Sun Hee, vi una lengua salir, se que a ella no le gusta las muestras de amor tan, pero tan románticas que lleguen incluso hasta empalagar a alguien, pero no podía evitarlo.

—¡Tú me obligaste a decir esto! — dije algo exaltado. Me estaba mostrando como me sentía realmente hacia ella, pero, Sun Hee no deja pasar una buena oportunidad para decir que soy cursi en el amor. Pues es cierto, aunque a veces a ella se le ha escapado algunas cosas cursis también, ya que ambos.... Ambos somos, inexpertos en el amor.