🎄¡Feliz Navidad!🎄

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Por fin ha llegado la Navidad! Esa maravillosa época del año que todo el mundo anhela que llegue. Y no precisamente para reunirse con la família. No me malinterpreteis. Me gusta ver a mis seres queridos. Sin embargo todos sabemos que esas reuniones con la familia pueden llegar a ser muy tediosas. Aún asi tengo que admitir que la Navidad és una de mis celebraciones preferidas, sin duda. Sin embargo a diferencia de otros años en los que habia deseado con todas mis ganas que empezarán las vacaciones de navidad de una maldita vez, este año no me habria importado en absoluto que se hubiera retrasado un poquito...
De hecho lo hubiera agradecido enormemente! Todo sea por escuchar esa hermosa voz eternamente.

*Unos dias antes*
Ya faltaba poco para acabar las classes. Todas mis amigas estaban ansiosas por que llegarán las vacaciones de una vez.
Yo también lo estaba...
Al menos hasta que tuvimos la primera classe con Jimin (si ése es su nombre, lo descubrí en la ceremonia cuando el director le presentó) en ese instante cambié totalmente de idea. La verdad es que llevaba desde la primera vez que lo vi esperando a que nos tocará una classe con él. Pero la espera se me hacia eterna!
-Cuando crees que nos dará classe?!
-No lo sé! Me lo has preguntado un millón de veces. Si no lo sabia la primera vez que te hace pensar que  la cuarta si?
Mi mejor amiga debia de estar harta de mi, pero es que la curiosidad me carcomia por dentro! De verdad él era professor de matemáticas? Parecía más bien un modelo. Y es que trás pasadas experiencias había perdido la fe en los profes de mates, y no creo que fuera la única. Ya que después de 2 sustitutos fallidos nadie tenia fe en el tercero. Sin embargo su llegada lo cambiaba todo. Aunque debo admitir que todo es gracias a nuestro último professor sustituto: Raymond, más conocido por mis compañeros como Raimundo. Sin él no habrían contratado a Jimin. Después de casi una evaluación de sufrimiento gracias a nuestro querido Raimundo, al menos por parte mia, ya que yo era  siempre el blanco de sus estúpidas broncas por reirme, parecía que tenía envidia de mi felicidad. Sé que tal vez no estaba bien reirme de él, no es que sea mala persona, pero es que era impossible no reirse! Preguntarle a cualquiera de la classe. Ese hombre hace demasiada gracia. Pero dejándo ese tema de lado, por fin tenemos a un professor decente. Más que decente! En mi opinión perfecto.
Estuve dos días, viendo como recorria los pasillos y salía del interior de la sala de professores. Hasta que por fin llegó el momento en el que le toco al fin entrar en nuestra classe.
Ése momento se produjó a primera hora de la mañana y como cada día Jijonenca me esperaba en el banco de siempre. Subimos como de costumbre a classe, éramos las primeras en llegar así que podíamos sentarnos dónde quisieramos. Sin embargo yo estaba tan cansada que me senté en el primer pupitre que encontré, el más cercano a la puerta que se encontraba en primera fila.
-Vamos más atras! Estamos en primera fila.
-Noo, me da palo! Tengo sueño.
-Yo me fui a dormir más tarde que tu vaga.
-Mm...
-Que?
-Nada.
Apoyé mi cabeza en la mesa, cubriendo mi rostro con el pelo  mientras se me comenzaban a cerrar los párpados sin poder evitarlo. Jijonenca comenzó a hablarme sobre sus planes para Navidad. Y aunque trataba de estar atenta a lo que me estaba explicando mi mente se fué a su mundo. Hasta que me percaté de que la classe comenzaba a llenarse con alumnos cansados y soñolientos.
- Levanta, la classe va a empezar. Me advirtió Jijonenca.
-Lo sé, que pereza... No quiero hacer classe! Dijé con fastidio sin despegar la cabeza de la mesa.
-Oye! Levanta!
-No quiero!
-No creo que digas lo mismo cuando veas a quien tenemos de profe.
-Que dices?! No será...
Me incorporé de un bote en cuestión de segundos. En cuánto levanté la vista vi a Jimin entrando en classe. Llegaba puntual, justo a en punto, ni un minuto más ni un minuto menos.
Iba vestido con una camisa blanca y unos pantalones negros ajustados. Llevaba el pelo perfectamente peinado como si acabara de salir de la peluquería. Me quedé como una tonta observándolo, mirando como entraba a classe y se dirigía a la mesa del professor.
-Buenos días! Dijó alegremente haciendo que todos se quedaran en silencio mientras dirigía la vista a la classe. Aunque me pareció que me miraba a mi por un momento. Y fué entonces cuando me percaté de mi deplorable aspecto. Tenia los pelos revueltos y parecia una zombie recién levantada. Además de tener cara de dormida, y de no saber distinguir si eso era un sueño o no. Jijonenca tuvo que darme unos golpecitos para que volviera a la realidad.
-Me llamo Jimin. Creo que ya nos presentaron en el acta de inicio de curso. Soy vuestro nuevo professor de matemáticas. Encantado.
Dijó sonriendo dulcemente a la classe.
-Bueno...me han contado que la primera evaluación ha sido algo complicada. Pero ahora que estoy aquí espero que nos llevemos muy bien y todos podais aprovar mi assignatura. Dijó mientras se sentaba encima de la mesa y se ponía las gafas que le hacían parecer más intelectual. Me quedé la mayoría del tiempo prácticamente hipnotizada mientras hacía su presentación.
Probablemente debía pensar que era una acosadora. Todos estaban atentos a su explicación, pero eso no quitaba que fuera primera hora y no quisieramos hacer classe. Así que justo cuando acabó de presentarse y todo el mundo creía que iba a empezar la classe para nuestra sorpresa siguió hablando y dejó la assignatura a un lado.
- Bueno, ya que és el primer dia podemos dejar las matemáticas para la próxima classe. Que quereis hacer ?
Preguntó con interés.
Ante esta pregunta todo el mundo se quedó callado así que optó por continuar.
- Bueno como la pizarra digital no funciona os voy a cantar una canción.
Todo el mundo se quedó sorprendido ante esta propuesta. Pero nadie dijó nada ni rechistó, todos esperabamos con curiosidad y expectación. Él se preparó y en cuanto comenzó a cantar todos quedamos maravillados. Su voz era tan dulce, y no cabía duda de que cantaba increíblemente bien.
La canción era preciosa y combinaba a la perfección con su melodiosa voz.
Se notaba que cantaba con sentimiento. Creo que nunca he oído a nadie cantar así. Realmente podía haber algo mejor que eso? Parecía que estaba en el paraíso. Creo que mi dia no podía mejorarse más. Podría quedarme escuchandolo cantar horas y horas...





Mi professor de matemáticasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora