Capítulo1-Editado

212 16 0
                                    

Luz. ¿Qué es la luz? ¿Es aquella cosa brillante que nunca se apaga? No lo se. Pero no, no puede ser. Eso no puede ser la luz. Ya que esta nunca se apaga pero en cambio la luz...mi luz. Últimamente se apaga. Todo es oscuridad. Es lo único que me rodea. Lo que me embarga. Lo que toma cada parte de mi. Cada onza de mi ser. ¿Cuándo ocurrió? Tampoco lo se. Pero si tuviera que decir un cuando creo, no, estoy segura de que sería justamente en ese instante. Cuando le perdí, cuando me perdí...

—Todo comienza cuando la profecía despierta— dijo aquella mujer desconocida poseedora de la horrenda túnica negra.

No podía verle. Su silueta solo se marcaba. Estaba consumida por la oscuridad

—¿El qué comienza?—quise preguntar, pero las palabras se quedaron ahogadas en el fondo de mi garganta ya que justamente en ese momento suena mi despertador.

Tratando de apagarlo cae al suelo y hace un ruido estridente.

—¡Mierda!—resoplé en voz alta mientras que con dificultad luchaba por levantarme de aquella cómoda cama.

Pero bien sabía yo que aunque tuviera mucha comodidad y sueño debía salir para enfrentarme al mundo exterior e ir a la escuela.

Así que decidida y soñolienta comienzo a prepararme para estar lista en este nuevo día.

Al terminar bajo a desayunar mis tostadas y me encuentro con algo que últimamente es muy común aquí. Una nota pegada en el refri.

"Cariño hemos tenido que salir en un viaje urgente para arreglar algunos asuntos de la empresa . Regresamos en una semana. "
             Con amor mamá

Después de mi desayuno me siento a esperar y recibo un mensaje de Adrianne mi mejor amiga desde que tengo uso de razón .

A:El sábado hay fiesta, ¿irás?.

M:Claro que sí—le tecleo en respuesta.

De pronto suena la puerta y salgo corriendo hacia ella contenta de no tener que esperar ni un minuto más.

Al abrir la puerta me encuentro con un guapo chico de cabello color castaño y unos hermosos ojos avellana, era nada más y nada menos que Matthew, mi mejor amigo.

—Hola, Matthew.

—Hola Madd—me responde con una mirada rara a la cual no pude comprender hasta un tiempo después.

De pronto escucho el sonido de un claxón y la histérica voz de Adrianne grita desde el auto de Megan diciéndome que me apresure.

—¡Ya voy!.

Recojo mis cosas, cierro la puerta y listo. Salgo por la enorme verja la cual es abierta por aquellos guardias a los que conocía desde pequeña puesto que desde siempre han trabajado aquí.

Al entrar al auto me reciben las caras sonrientes de Megan, Ashton y por supuesto de Adrianne, quien no podía faltar. Luego se les suma Matthew el cual se sienta de copiloto.

—¿Por qué hoy me miran todos así?—pregunté expectante debido al desconcierto que me generaban.

—¿No será porque pareces tener un nido de pájaros en la cabeza?—pregunta Ashton con una sonrisa enorme.

Hermosa Oscuridad #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora