｢ baja presión ｣ kookv · ✦.

❥ 10 ●

Taehyung salió del baño con los cabellos húmedos y la ropa que Jungkook le había prestado puesta, se sentía mucho mejor luego de esa ducha, refrescado y el shampoo olía delicioso, igual que su dueño.

-Kookie...- El castaño avanzó hacia donde recordaba estaba la oficina -¿M-Mi uniforme?- Preguntó. Había mirado por varios lugares y no lo encontraba.

-Oh, está para lavar- Contestó el pelinegro sin preocupaciones, mientras cortaba unos trozos de queso para preparar un omelette.

-Pero tengo que ir a la escuela...- Afirmó algo frustrado y sólo un poco enojado con Jungkook.

-No lo creo, sigues enfermo- Negó con la cabeza -Ahora te ves un poco mejor que anoche, pero si vas a la escuela sólo vas a empeorar Taetae.

Taehyung asintió, no quería dejar plantado a su amigo Jimin, pero ciertamente Kook tenía razón. No quería que su condición empeorara porque eso significaría al final faltar más veces de las estimadas.

-Ya estará hecha la comida, puedes sentarte Taetae- Murmuró y el nombrado hizo caso, yendo a la mesa a sentarse. El pequeño jugó con sus manos y su cabello, tal vez debía cortarlo un poco ya que estaba muy largo y no le gustaba así.

Pronto la comida llegó a la mesa junto con dos vasos de gaseosa. Jungkook se sentó y miró a su menor algo inquieto -¿Qué sucede Tae?

-Mhh, me quiero cortar el cabello- Puchereó el menor, se notaba más suelto con el mayor si lo comparábamos con los primeros días de aquella amistad, donde simplemente habría contestado 'No pasa nada'.

-Ohh~ es cierto, lo tienes un poco largo, no se nota, pero ¿Te molesta?- Vio cómo el castaño asentía, señalando su flequillo, que tapaba los ojos -Ohh, puedo prestarte una hebilla, uso varias porque cuando leo mi flequillo no me deja ver- Soltó una risa.

-G-Gracias Kookie- Aceptó sonrojado y comenzó a comer -Está muy rico~

Comieron tranquilos, bastante rápido -¿No vas a ir a la universidad o al trabajo?- Preguntó el curioso castaño mientras alzaba la mirada, contemplando a su amor platónico levantando los platos y vasos.

-Oh, faltaré a ambos Taehyunie- Kook se volteó y dejó todo para lavarlo nuevo -¿Quieres ir al sofá y poner alguna peli? Yo iré a buscarte la hebilla ¿Hace cuánto no vas a la peluquería?- Preguntó mientras buscaba en el tarro donde guardaba exclusivamente sus hebillas de cabello.

-Hmm, hace unos meses...- Murmuró avergonzado, se sentía como un sucio o precario por no haber ido en tanto tiempo, pero él era todo menos eso, la culpa recaía en su madre, que ni lo llevaba al médico.

-Tae...hay que hablar sobre tu madre ¿Qué harás con eso?- Jeon se acercó a su amigo, que estaba ya sentado en el sofá, jugando con los botones del control sin razón -Por favor, deja el control y mírame...

Taehyung se quedó en silencio, evadiendo la mirada de Jungkook -S-Soy muy pequeño para hacer algo...los adultos siempre me pasarán por arriba...

-No Tae, sí eres pequeño y tienes la mala suerte de vivir en esta situación, debes tomar una decisión con esto Taetae- Murmuró con cariño mientras tomaba los suaves cabellos de su querido, y los sujetaba con una tierna hebillita.

Taehyung estaba notablemente sonrojado, se veía adorable con la frente despejada, sus rasgos eran aniñados y sus ojitos brillaban cuando el mayor estaba cerca -S-Sólo...- Tartamudeó nervioso -Quiero que...v-vayamos a hablar con mamá y...listo.

-¿Listo?¿Qué quieres decir?

-Q-Quiero que-darme c-contigo...- Habló bajito y entrecortado, cerrando los ojos con fuerza. Creyó indicado el momento para confesar sus sentimientos, lo había planeado bastante bien.

Es decir, si lo rechazaban, podía volver a casa y seguir con su ''vida'', y si le correspondían, iba a poder ser mucho más feliz y ver a Jungkook todos los días, casarse, besarlo, abrazarlo, un abanico de opciones.

-Está bien Tae...iremos a hablar con tu madre cuando anochezca si es lo que quieres, pero si tienes miedo, podemos irnos en cualquier momento o puedes esperarnos fuera ¿Sí?- Vio al menor asentir.

-Sí Kookie...p-pero, tengo que decirte algo antes- Sus mejillas comenzaban a arder más de la cuenta, su respiración se alejaba. Tae se separó un poco y miró hacia otra parte -K-Kookie, t-tú...me gus-tas.

El castaño hundió su cara en la almohada del sofá y todos los arrepentimientos y prejuicios llegaron a él, ideas como que Jungkook iba a decir que no, que iba a quedar como un ridículo o incluso un niño precoz.

Sólo se calmo al mismo tiempo que se asombró mucho cuando sintió unos fuertes y grandes brazos rodeándolo, sentir el pecho de Jungkook sobre su espalda. El menor se volteó levemente, quitando su rojito rostro de la almohada para intentar ver al pelinegro.

-A mí también me gustas, pequeño...¿Enserio te gusto?¿No es una broma?- Preguntó inseguro el mayor, casi en un susurro. Notó que Taehyung no contestaba nada y se separó de él para que se desinhibiera un poco.

-N-No es broma- Advirtió y soltó un quejido al sentir el fuerte abrazo que Jeon le había dado -A-Ay

-Oh, lo siento- Puchereó el mayor al recordar que su menor estaba lastimado y había que ser cuidadoso con él -Es que...estoy muy feliz, hace poco noté que me gustabas y...bueno, me siento algo culpable porque eres pequeñito.

El castaño sonrió sin poder creerlo -Ahh~ te gusto y me gustas- Esta vez él le dio un abrazo a Kook, sólo que mucho más suave y delicado.

-Sí...- Jeon sonrió -Tae, prometo que te protegeré ¿Sí? Siempre daré lo mejor de mí para no verte sufrir, bebé- El apodo se le escapó y juró haber visto el paraíso cuando contempló al pequeño sonrojándose y siendo un ícono de nerviosismo al escucharlo decirle así.

-G-Gracias K-Koo-kie- Tartamudeó en exceso y volvió a hundir su cara en la almohada.

-No~ déjame verte, Taetae- Lo tomó del mentón para observarlo sin obstáculos, aunque más bien estaba observando sus rosados labios.

Taehyung notó eso y lo dejó ser, cerró los ojos al sentir la presión de los belfos ajenos sobre los suyos, percibiendo una sensación de calor en su pecho, sintiéndose protegido entre los brazos del mayor, su rostro lleno de besitos mientras veían una película.

Al fin encontró a alguien que lo amara.